Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Sábado 6 de julio de 2002
  Primera y Contraportada
  Editorial
  Opinión
  Correo Ilustrado
  Política
  Economía
  Cultura
  Espectáculos
  CineGuía
  Estados
  Capital
  Mundo
  Sociedad y Justicia
  Deportes
  Lunes en la Ciencia
  Suplementos
  Perfiles
  Fotografía
  Cartones
  Fotos del Día
  Librería de La Jornada
  Correo Electrónico
  Búsquedas
  >


 

Política

Miguel Concha

Mary Robinson y las ONG

Si algo ha caracterizado la íntegra y clarividente actuación durante 5 años de la señora. Mary Robinson como titular de la oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH), ha sido su valiente e imparcial compromiso con la dignidad humana, como matriz fundamental para la solución y prevención de todos los conflictos que hoy afligen al mundo y, como consecuencia, su confianza, aprecio y esperanza en las labores que realiza la sociedad civil, para promover y defender todos sus derechos. Se dice entre sus asistentes que Mary Robinson puede faltar o llegar un poco tarde a alguna de sus entrevistas, pero nunca a una cita con las organizaciones ciudadanas de derechos humanos. Esto hace que por un lado ciertamente constituya un enorme desafío el encontrarle una sucesora o sucesor tan coherente a partir del próximo mes de septiembre, como expresó en abril Kofi Annan, cuando por presiones de algunos gobiernos poco celosos del respeto a los derechos humanos, como el ruso y el estadunidense, tenga que abandonar su actual encomienda; y que por otro algunos oficiales de algunos Estados, que se consideran exclusivos representantes de sus conciudadanos, aunque siempre vivan lejos de ellos y sus problemas, o jueguen a representar que los representan "democráticamente" después de las elecciones, se muestren atónitos y confundidos ante el crédito que les concede a los diagnósticos y propuestas de las organizaciones civiles. Durante su reciente viaje a México, para participar en el seminario continental de seguimiento a la "Cumbre de Durban contra el Racismo, la Discriminación, la Xenofobia y otras formas de Intolerancia, y firmar el acuerdo para el establecimiento de una oficina del ACNUDH en nuestro país, como parte de la segunda fase del Acuerdo de Cooperación Técnica con el gobierno mexicano, suscrito en Oaxaca en diciembre del 2000, Mary Robinson volvió a expresar la necesidad de que las organizaciones no gubernamentales mexicanas de derechos humanos participen activamente en la elaboración del diagnóstico sobre la situación de los derechos humanos en México, así como en la designación de los seis peritos nacionales y extranjeros que lo habrán de calificar hacia finales de diciembre, con el fin de que éste resulte en verdad "claro, certero, preciso y completo", y se pueda contar al mismo tiempo con propuestas eficaces para la política de derechos humanos en el país.

Para ello, ya en diciembre del año 2000 había aceptado la conformación de un comité de enlace, compuesto por 12 organizaciones ciudadanas mexicanas de derechos humanos, para que participaran activamente en la primera fase del Acuerdo de Cooperación Técnica con el gobierno, y a comienzos de este año aceptó con gusto, a propuesta de ellas, que se incrementara a 18. El martes pasado escuchó una vez más con atención en la sede de la ONU en México el diagnóstico que le presentaron, las animó con entusiasmo en su trabajo, y procuró dar respuesta inmediata a sus peticiones. A diferencia de los gobiernos, que muchas veces se pierden en números impersonales y acciones administrativas burocráticas, les pidió ejemplos concretos de los casos de violaciones que denunciaban, con el fin de traer al centro de las preocupaciones a las propias víctimas, al mismo tiempo que reconocía a las organizaciones como interlocutores cualificados. Antes de partir decidió que uno de sus principales oficiales en Ginebra se mantuviera en contacto directo y continuo con las organizaciones de derechos humanos mexicanas, y le pidió a éste que sin dilación tuviera ya al día siguiente un encuentro con todas ellas aquí en México, con el fin de garantizar un mecanismo de información y diálogo eficaz con el ACNUDH, en tanto se instala a partir de septiembre, luego de la aceptación por el Senado, su oficina en el país; y quedó claro que se asegurará la participación del Comité de Enlace Ampliado en todo el proceso de elaboración del diagnóstico y plan nacional de acción por los derechos humanos, comenzando por la selección de los expertos nacionales y extranjeros.

Una de las conclusiones del seminario de seguimiento de la cumbre de Durban es la constitución de comités nacionales para verificar el cumplimiento de los compromisos entonces asumidos. Ojalá que el gobierno vea con buenos ojos está iniciativa, para monitorear con mayor precisión nuestras acciones contra el racismo, la discriminación, la xenofobia y otras formas de intolerancia.

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año