Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Viernes 19 de julio de 2002
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Mundo
El canciller marroquí suaviza el diálogo y confía en que "triunfen la sabiduría y el diálogo"

Exige Aznar al gobierno de Marruecos respeto al islote Perejil; Rabat demanda la retirada española

ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL

Madrid, 18 de julio. El presidente del gobierno español, José María Aznar, exigió hoy al gobierno marroquí una "declaración tajante, sin fisuras ni ambigüedades" que garantice que se respetará el status quo previo al 11 de julio y que sólo entonces se retirarán las fuerzas españolas del islote Perejil. A su vez, Rabat exigió el retiro inmediato de sus "aguas territoriales" de los buques de guerra españoles y pidió a la Organización de Naciones Unidas mediar en el conflicto territorial con España.

Perejil permanece ocupado desde el miércoles por los soldados de la Legión Española por órdenes de Aznar, en lo que fue la primera operación militar de España contra Marruecos en décadas.

El pasado 11 de julio una docena de miembros de la policía marroquí decidieron desplegar en el enclave un campamento que serviría para la lucha contra "el terrorismo y la inmigración ilegal". Los soldados magrebíes desplegaron una bandera y se instalaron en el islote que Marruecos llama Leila, lo que motivó que Madrid exigiera la retirada inmediata del destacamento, al apelar a un status quo asumido de facto, que establece que el peñón no pertenece ni a España ni a Marruecos, y que por tanto nadie puede ocuparlo o desplegar insignias.

Sin embargo, las autoridades marroquíes reclamaron el peñón como suyo y se negaron a retirar su destacamento en las reuniones que mantuvieron los dos gobiernos en los cinco días de "crisis diplomática", que terminó con la movilización de 28 soldados de las fuerzas especiales, un submarino, cinco helicópteros de asalto, dos buques de guerra e incluso desplegó fuerzas antimisiles en la ciudad española de Ceuta.

Aznar señaló hoy que "España no acepta hechos consumados ni busca tensiones indefinidas, pues nadie está más interesado que España en mantener las mejores relaciones con el Reino de Marruecos". El ministro de Defensa español y ejecutor del operativo, Federico Trillo, sostuvo que los 75 legionarios desplegados en Perejil permanecerán en sus "puestos hasta que sea menester", al tiempo que informó que algunos comandos permanecen "alerta" y negó que previo a la operación militar existieran negociaciones entre Marruecos y España.

Ana Palacio, ministra de Asuntos Exteriores, pidió a Rabat una "declaración tajante, sin fisuras ni ambigüedades" que garantice que "no se va a repetir una vuelta subrepticia a la ocupación marroquí", por lo que reiteró que hasta que este gesto no se produzca el islote permanecerá controlado por las milicias españolas.

El canciller marroquí, Mohamed Benaissa, afirmó que "este islote constituye parte integrante del territorio nacional", si bien adoptó un tono más conciliador al de ayer, cuando afirmó que lo hecho por España era una "declaración de guerra", al señalar que "somos optimistas y confiamos en que la sabiduría y el espíritu de diálogo van a triunfar".

Mientras, el marroquí Partido de la Justicia y del Desarrollo convocó a una "marcha popular" para reivindicar la "liberación" de las Islas Chafarinas, Ceuta y Melilla.

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