Exigen se esclarezca asesinato de magistrados

Señora directora: Solicitamos la publicación de la presente carta, dirigida al presidente de México, Vicente Fox; al presidente de la SCJN, Genaro Góngora Pimentel, y al procurador Rafael Macedo de la Concha.

Hace un año en Mazatlán, Sinaloa perdieron la vida, entre otros, el magistrado Benito Andrade Ibarra y su esposa.

Exigimos al gobierno federal se castigue a los responsables materiales e intelectuales, ya que hasta la fecha no hay una versión oficial objetiva que dé una explicación coherente de tan lamentables sucesos.

Consideramos que los magistrados asesinados, antes de funcionarios, eran ciudadanos que creían en la difícil tarea de construir un verdadero estado de derecho ante la cuestionada justicia mexicana; en ese contexto reivindicamos la honorabilidad de nuestro compañero y amigo Benito Andrade Ibarra y de su señora esposa; exigimos al presidente Vicente Fox que este caso, como otros, no quede en los archivos de la nación y en los anales de la historia de nuestro país, en la que el sistema político mexicano se ha caracterizado por la subcultura de la impunidad como forma de gobierno, por eso ustedes hoy tienen la palabra: "...Nosotros, los de entonces, ya no somos los mismos..." (P. Neruda.)

Genoveva Sánchez, Lic. Horacio Gaspar, Alejandro López, doctor Samuel Tovar, Lic. Leonardo Gómez, Lic. Manuel Calixto, Ing. Pablo Marín, Lic. José Guadalupe Sánchez, Corriente Socialista PRD Puebla, Doroteo Fernández, Adolfo González, Rubén Moreno, Lic. Leopoldo Uribe, Ricardo Jiménez, Lic. Porfirio Palestina, René Martínez

Señora directora: Mucho le agradeceré la publicación de la presente.

Creo que ha llegado el momento de que la Organización de Naciones Unidas (ONU) muestre al mundo el objetivo primordial de su existencia como organismo supremo en pro de la paz, desde su creación después de la segunda guerra mundial.

Creo que este es un importante momento de disyuntiva política para la ONU. Por un lado, Estados Unidos busca argumentos para atacar a Irak con el apoyo incondicional de su eterna "concubina", Gran Bretaña, que tiene gran desaprobación del clero católico, además de un gran sector de la sociedad británica y hasta la división de los diputados laboristas.

Por otro lado, la ONU tiene la obligación moral y ética, como institución seria e imparcial, de no sólo recomendar, sino más bien exigir como órgano mundial supremo a estas dos potencias bélicas el cese de sus amenazas infundadas, que están además llenas de inconsistencias (como el amplio reporte dado a conocer por Tony Blair, detallando el peligro que representa Irak) y declaraciones que ya no convencen a nadie; como ha sucedido con el canciller alemán, Gerhard Schöeder, quien ha manifestado públicamente su desacuerdo con la política de ataque al régimen de Bagdad de manera unilateral, sin previo consentimiento de la ONU.

La ONU debe hacer valer la supremacía que se le ha conferido, porque dos países, por muy poderosos e influyentes que sean en la comunidad internacional, no pueden tomar decisiones que le competen única y exclusivamente a la ONU, ni siquiera debe ser una decisión del Consejo de Seguridad, sino más bien a través de una asamblea general de la misma.

Organismos mundiales también se han manifestado inconformes con estas políticas de intereses de corte imperialista (pues es obvio que son intereses petroleros), como ha señalado Amnistía Internacional, que se opone a un eventual ataque a Irak, por conducto de su dirigente Irene Khan.

Sin duda alguna ésta es una prueba de fuego para la credibilidad de la ONU, y Kofi Annan está entre la espada y la pared.

Edwin Rodríguez

Señora directora: El pasado 28 de octubre, indígenas de la región Loxicha, Oaxaca, levantamos el plantón que desde el 30 de septiembre manteníamos afuera del Congreso federal en busca de la aprobación de una ley de amnistía general para presos y perseguidos políticos y de conciencia en nuestro país (creo que todavía podemos decir que es nuestro) y lo será más en la medida en que todos tengamos el valor de defenderlo.

Siguieron algunas actividades: la marcha con la UPVA 28 de Octubre en Puebla, el difícil retorno a Oaxaca, entrevista con el Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias el 3 de noviembre en Oaxaca, la ratificación y ampliación de la denuncia presentada en contra del ex secretario de Gobernación, Diódoro Carrasco Altamirano, y otros por delitos de lesa humanidad el día 6 ante la Fiscalía Especial para Movimientos Sociales y Políticos del Pasado; el retorno a las comunidades de quienes por más de dos meses abandonaron el refugio de sus montañas para buscar la libertad de sus paisanos, los presos indígenas de la región Loxicha.

Y ahora, cuando sabemos con certeza que después de muchas vicisitudes todos están a salvo podemos decir: cumplimos.

Esperamos que ahora los tres poderes de la Unión sepan cumplir, pero si no, nosotros nos preparamos para volver y prometemos que cada día seremos más.

Es necesario hacer un sincero agradecimiento al pueblo y organizaciones sociales que con su esfuerzo hicieron posible esta dura jornada: en los boteos hubo quienes se desprendieron de lo poco que tenían para apoyarnos, desde 10 y 20 centavos que de uno en uno llegaron a sumar más de 150 pesos, esto nos habla de la magnanimidad de nuestro solidario pueblo; por el contrario, hubo políticos que prometieron apoyo y nunca lo llevaron, pero también los llevaremos en el corazón.

Especial mención merecen los medios de comunicación que con su esfuerzo hicieron posible que nuestra movilización no fuera inadvertida; gracias por permitir que nuestra voz sea escuchada.

Reciban todos un fuerte abrazo de agradecimiento y hasta pronto.

Por la Organización de Pueblos Indígenas Zapotecos (OPIZ), Juan Sosa Maldonado

Señora directora: El jueves 7 de noviembre se publicó una nota cuyo título dice: "La educación pública, culpable de la descomposición social: arzobispado de México". En el primer párrafo se afirma que "la ausencia de valores éticos y morales en las escuelas públicas ha sido el factor principal de la 'descomposición social' en el que vive el país y el mundo contemporáneo".

Esta afirmación es errónea, pues en el comunicado emitido no se señaló a la educación pública como culpable de la descomposición social.

Lo indicado por la comisión a mi cargo fue que la ausencia de los valores morales en el sistema educativo (donde se incluye la educación pública y privada) da como resultado la descomposición social que en los últimos años vive el mundo contemporáneo.

Me parece importante esta aclaración, ya que el primer Congreso Internacional de Educación busca enriquecer el sistema educativo, lo cual va más allá de confrontar simplemente el sistema de educación pública. Agradezco de antemano su atención a la presente aclaración.

Dr. Pbro. Rogelio Alcántara Mendoza, director de Pastoral Educativa de la Arquidiócesis Primada de México

Señora directora: Quiero hacer del conocimiento público mi desacuerdo con la voracidad oportunista de Avantel SA. Mi recibo telefónico de largas distancias reporta un consumo de 16.52 pesos, más un costo adicional de 33.48 pesos, marcado como "otros cargos".

Llamé a esta compañía y me informaron que han decidido que como usuarios debemos hacer un gasto mínimo de 50 pesos, si no, nos cobrarán la diferencia para completar dicho consumo. Le manifesté mi inconformidad a la persona que me atendió y la arbitrariedad y unilateridad de tal decisión. Me respondió que hicieron una consulta y que era muy extraño que no lo supiera, pues todos sus clientes lo saben y están de acuerdo (a mí nadie me preguntó, no estoy de acuerdo y dudo que todos sus usuarios lo estén).

Este tipo de decisiones unilaterales demuestra la rapacidad de compañías como ésta. Basta de este tipo de robos por parte de trasnacionales y de que las autoridades no hagan nada sino favorecerlas con la complicidad del silencio. ¿Es esto la justicia del libre mercado? Sólo es muestra de cómo los supuestos beneficios de la apertura a los mercados es totalmente falsa. ¿Así será el Plan Puebla-Panamá o el ALCA? Señor Fox, gracias por pensar en el pueblo de México.

Exijo la intervención de las autoridades correspondientes ante estas arbitrariedades.

José Luis Victorio

En el suplemento especial de Calaveras 2002 se cometió un grave error que agravia a un mexicano y exonera de culpas a otro. Las dos calaveras que los lectores enviaron, destinadas a Rogelio Montemayor Seguy, ex director de Pemex, involucrado en el Pemexgate, fueron encabezadas con el nombre de Carlos Montemayor, antropólogo, historiador, analista político, amigo y colaborador de nuestro diario.

Mucho lamentamos esta equivocación, pero creemos se debe a que todavía la fama pública de los malosos no supera la de los virtuosos, lo que nos hace recordar sus fechorías, pero no sus nombres.

Ofrecemos disculpas, a uno por confundirlo con un prófugo, y a otro por restarle méritos a sus fechorías no acreditándoselas a su nombre.
Magú, coordinador del suplemento