Espera sentencia
Miles de sindicalistas piden a Chirac perdón para Bové
THE INDEPENDENT
Paris, 2 de marzo. Más de 60 mil simpatizantes del líder campesino francés José Bové -incluyendo unos 6 mil de Japón y varios cientos de estadunidenses- escribieron cartas al presidente Jacques Chirac para que otorgue el perdón al líder antiglobalización que ya ha pasado dos breves periodos en la cárcel, acusado por la destrucción de un restaurante McDonald's en 1999.
Esta vez Bové podría enfrentar una pena de hasta 10 meses de prisión por atacar dos sembradíos de plantas genéticamente modificadas, informó una corte de apelaciones que le hará saber en los próximos días su decisión final.
Los grupos campesinos pertenecientes al sindicato FNSEA, cercano al actual gobierno y especialmente al presidente Chirac, han impulsado desde hace tiempo medidas de protesta que suelen derivar en violencia: bloqueos de caminos, destrucción de cargamentos enteros de jitomates españoles y actos de vandalismo contra edificios públicos.
A pesar de que la justicia francesa ha comenzado a adoptar una línea más dura contra tales actos, la organización de Bové, que representa a grupos "tradicionales" de pequeños campesinos, ha sido más castigada que los sindicatos cercanos al poder.
París dijo que no considerará otorgar el perdón a Bové hasta que la justicia decida la forma en que lo castigará, al mismo tiempo que el dirigente rechazó presentarse ante el juzgado hasta que el mandatario conservador decida si lo perdona o no.
"Esta es la primera vez que un líder sindical es sentenciado a penas tan largas de prisión por una acción legítima de desobediencia civil", consideró Bové. Y agregó: "el verano pasado, fui a la cárcel manejando mi tractor. Esta vez, si me quieren arrojar en la Bastilla, tienen que venir por mí".