Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Domingo 13 de abril de 2003
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Mundo
BAJO LA LUPA

Alfredo Jalife-Rahme

La "carga del hombre blanco": el petróleo de Irak

Del destino manifiesto al mandato divino

La defensa del "imperialismo moral"

AHORA SE ENTIENDE que la captura de los 13 yacimientos de Irak es el gran favor que el equipo Bush le hereda a la humanidad, los que el Pentágono proyecta privatizar de acuerdo con el modelo del neoliberalismo y el concepto colonial de la "carga del hombre blanco", argumento filantrópico que empleó Estados Unidos para dominar el archipiélago de Filipinas a inicios del siglo XX.

ESTADOS UNIDOS PASA en 105 años -desde 1898, con el presidente Teddy Roosevelt- de la aplicación del destino manifiesto al mandato divino de 2003 con Baby Bush.

EL DESTINO MANIFIESTO decimonónico y el mandato divino del fundamentalismo cristiano apocalíptico (el "síndrome Armagedón") a inicios del tercer milenio que profesa eminentemente la denominación protestante de los "bautistas sureños" forman parte de la evangelización militar del imperio estadunidense, que vislumbra su misión de sacrificio y liberación en los términos conceptuales de la "carga del hombre blanco".

MUCHO DEL PENSAMIENTO de los bautistas sureños (escindidos de los del norte durante la Guerra Civil) proviene de la mentalidad esclavista de los confederados del eje Texas-Oklahoma, donde abundan los supremacistas blancos, y ha renacido bajo la máscara de la guerra preventiva unilateral. Cabe recordar que los supremacistas blancos de confesión bautista sureña del eje Texas-Oklahoma fueron los aliados del entonces imperio de Gran Bretaña contra los independentistas y antiesclavistas del noreste.

EN FORMA INTERESANTE, Jeel Heer, del Boston Globe (23 de marzo) demuestra que los más ardientes neoimperialistas aliados del equipo Bush no nacieron en Estados Unidos y exhiben la mejor opinión sobre el imperio británico, a grado tal que abogan por la instauración de un "imperio estadunidense", que debiera concretarse en una anglosfera en la que Estados Unidos juegue el papel previo de Gran Bretaña. Se basan en los preceptos racistas y humillantes del escritor colonial británico Rudyard Kipling, quien avaló la captura de Filipinas por el entonces presidente de Estados Unidos Teddy Roosevelt, bajo el lema de "la carga del hombre blanco".

EN FORMA IDENTICA, los "25 neoconservadores" de Estados Unidos que diseñaron la guerra contra Irak, en su mayoría israelí-estadunidenses, según la misma prensa de Israel (ver Bajo la Lupa, 9 de abril), consideran la tarea de liberación y reconstrucción extensiva a todo el nuevo Medio Oriente, como "la carga del hombre blanco".

EN ESTE TENOR, Paul Wolfowitz, el subsecretario de Defensa e ideólogo de la guerra preventiva, piensa aplicar el modelo filipino a los países islámicos.

FUE JUSTAMENTE KIPLING quien calificó como "gran juego" la lucha geopolítica que libraron Rusia y Gran Bretaña por la posesión de Afganistán en el siglo XIX. Los "grandes juegos" de los anglosajones no han cesado en Afganistán, totalmente devastado pese a sus múltiples reconstrucciones seculares y a sus experimentos democráticos: ahora es administrado por los halcones de Estados Unidos. Heer señala a los neoimperialistas que no nacieron en Estados Unidos: Max Boot (nacido en Rusia); Charles Krauthammer (nació en Uruguay y creció en Canadá); Dinesh D'Souza (nació en India); Paul Jonson (Gran Bretaña); Mark Steyn (Canadá); Michael Ignatieff (de origen ruso, nació en Canadá) y Conrad Moffat Black (israelí-anglocanadiense).

ES NOTORIO QUE los neoimperialistas proceden de Gran Bretaña o de colonias británicas donde fueron intoxicados mentalmente.

MERECE UNA CITA especial Conrad Moffat Black, uno de los principales magnates de los medios de comunicación a escala mundial (The Jerusalem Post, The Daily Telegraph, Toronto Star, etcétera), bajo el paraguas corporativo de la trasnacional Hollinger Corporation, cuyo sector de multimedia es dirigido por el israelí-estadunidense Richard Perle (metido en serios líos criminales de triangulaciones de negocios inmundos desde el Pentágono, donde abusó del influyente puesto al que fue obligado a renunciar). En un delirante artículo (Edmonton Sun, 31 de marzo), Conrad Moffat Black, después de despotricar contra Francia y Alemania (solamente le faltó acusarlos de "antisemitas"), exigió la "disolución de la ONU", cuyas "votaciones son una farsa" y donde los países son sujetos a "sobornos" para votar.

LLAMA LA ATENCION que todos los neoimperialistas, que se traslapan con los "25 neoconservadores" (en su mayoría israelí-estadunidenses), piensen igual: Perle y Krauthammer se habían adelantado a Black en sus diatribas contra la ONU, que consideran desechable (pese a la invaluable colusión del ghanés Kofi Annan), para sustituirla por el "nuevo imperio" anglo-texano-israelí basado en el "imperialismo moral" (sic).

¿CABE LA CAPTURA de los 13 yacimientos petroleros de Irak dentro de "la carga del hombre blanco"? El día de la caída del régimen baazista de Bagdad, Bronwen Maddox señaló que "la madre de todas las batallas será la del oro negro" (Times, 8 de abril): "¿Quién se quedará con el petróleo de Irak? ¿Sus acreedores, a quienes se les debe miles de millones de dólares, o las trasnacionales que reconstruirán el país, o el nuevo gobierno iraquí?" Maddox aduce que los 100 mil millones de dólares para la reconstrucción de Irak "se ven muy bajos para reparar los efectos de tres guerras en 23 años".

CON LA DESTRUCCION de la infraestructura de Irak, gracias a la notable precisión de la tecnología militar angloestadunidense, solamente regresar la electricidad al estado de 1990 costará 20 mil millones de dólares, según la Academia Estadunidense de Artes y Ciencias.

DESARROLLAR LOS NUEVOS yacimientos petroleros costará 40 mil millones de dólares, según un reporte del Consejo de Relaciones Extranjeras, con sede en Nueva York (cuya publicación en español apadrina el ITAM, el caballo de Troya del equipo Bush en la fase de desnacionalización de México).

IRAK FIRMO CONTRATOS con empresas foráneas por 57 mil 200 millones de dólares para el desarrollo petrolero y de las telecomunicaciones, que van a causar cefaleas en cualquier corte legal internacional.

IRAK AUN NO HA pagado los daños de guerra de 1991, acordados en la ONU (bajo el lema "el que pierde paga"), por 27 mil millones de dólares, y todavía están bajo litigio (que seguramente "perderá" Irak) por compensaciones de daños de guerra del mismo 1991 otros 172 mil millones. ¿Cuánto cobrarán ahora Estados Unidos y Gran Bretaña por su destrucción masiva, que aún no concluye?

IRAK ADEUDA UN mínimo de 383 mil millones, según Frederick Barton y Bathsheba Crocker, del Centro Internacional de Estudios Estratégicos (CSIS, por sus siglas en inglés, que fomenta la privatización del petróleo mexicano con un grupo de ex funcionarios polkos, juniors del PRI, panistas nuevos ricos y centralbanquistas zedillistas-cordobistas). Desde 1990 Irak no ha realizado pagos de capital y los intereses no han cesado de correr, por lo que en forma "conservadora" el mínimo adeudo total (considerando los intereses moratorios) sería de unos jadeantes ¡2 billones 958 mil millones de dólares! (¡casi cinco veces el PIB de México!).

¿DE DONDE SALDRA tanto dinero? ¿De la "liberación y democratización" de Irak? ¿Será el petróleo de los 13 yacimientos de Irak "la carga del hombre blanco" anglo-estadunidense-israelí que tendrá que sacrificarse al máximo para reconstruir al devastado Irak? Maddox (del Times, que comparte fuertes vínculos con las petroleras anglosajonas Shell y British Petroleum) sugiere la respuesta al asegurar que Irak posee más de los 112 mil millones de barriles (MB) de reservas probadas, que serían más bien 200 mil MB, no muy atrás de los 250 mil MB de Arabia Saudita, pero deja entrever que pudiera alcanzar hasta 550 mil MB: "los exploradores apenas han mirado las 9/10 partes del país, en especial el vasto desierto en la parte occidental". Así que todavía viene lo bueno. El Departamento de Energía de Estados Unidos (reporte de octubre de 2002) había adelantado que las reservas probadas de Irak alcanzarían 300 mil MB, mucho más que las de Arabia Saudita, consideradas las primeras mundiales. Pero Maddox se atreve a enunciar la azorante cifra de 550 mil MB, sin dejar de enfatizar que el barril tiene un precio de extracción de medio dólar en la región de Basora: el más barato del mundo, por encontrarse a flor de suelo; en comparación, la extracción del barril del mar del Norte es de 11 dólares y el de México de tres dólares. Estos "nuevos hallazgos" transformarán radicalmente la geopolítica regional.

PARA QUIENES A estas alturas duden sobre las evidencias de que la guerra de Irak versa primordialmente sobre el petróleo, "la carga del hombre blanco", al que se han agregado otros factores que la convirtieron en parte de una "guerra multidimensional", sería conveniente analizar un nuevo estudio "Cruda Visión: como los intereses petroleros de EU oscurecieron el enfoque del gobierno de EU sobre las armas químicas de Saddam Hussein", por el Institute for Policiy Studies (IPS, por sus siglas en inglés; Instituto de Estudios Políticos), que se basa en comunicaciones diplomáticas secretas (recientemente desclasificadas por los Archivos Nacionales) y comunicaciones internas de Bechtel Corporation.

DAVID LINDORFF (Counterpunch, 9 de abril) cita profusamente parte de los documentos desclasificados, "que demuestran que el petróleo es la causa subyacente a la guerra en Irak", donde se conjugan los intereses corporativos de Bechtel Corporation (cuyo representante fue George Schultz, el secretario de Estado de Reagan) con los del actual vicepresidente, Dick Cheney (de la petrolera texana Halliburton), y del actual secretario de Defensa, Donald Rumsfeld (como directivo de la empresa farmacéutica Searle). El encuentro de Saddam y Rumsfeld en la década de 1980 revela "los esfuerzos de la administración Reagan con el fin de obtener la aprobación de Saddam para la construcción por Bechtel de un oleoducto desde los campos petroleros del Eufrates, en la parte suroccidental, hasta Jordania y el golfo de Aqaba". El proyecto ha sido resucitado y hoy Bechtel es una de las favoritas para reconstruir Irak: "la carga del hombre blanco".

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