Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Martes 29 de abril de 2003
.


























Primera y Contraportada
Editorial
Opinión
Correo Ilustrado
Política
Economía
Mundo
Estados
Capital
Sociedad y Justicia
Cultura
Espectáculos
Deportes
CineGuía
Lunes en la Ciencia
Suplementos
Perfiles
Fotografía
Cartones
La Jornada en tu PALM
La Jornada de Oriente
La Jornada Morelos
Librería
Correo Electrónico
Búsquedas



P O L I T I C A
.. Marco Rascón

¿Quiénes convocan a la convención?

Nosotros mismos, nuestras críticas, nuestros propósitos, nuestros esfuerzos, nuestra identidad, nuestra convicción, nuestra determinación para detener la usurpación. Por eso, hablemos en positivo: el PRD sí es rescatable; la burocracia y los grupos dirigentes que se corrompieron, esos no.

El tiempo y los excesos que desviaron los propósitos originales hicieron madurar las condiciones para una reconstrucción del movimiento, y desde los municipios, los estados y la capital se empieza a generar la confluencia hacia la convención.

Este proceso, no obstante, no es asunto interno. Tiene que ver con una crisis incipiente, pero ya profunda, del sistema de partidos y la descomposición de las instituciones de la República, una vez que la vieja oligarquía económica se apoderó de la transición, descarnando el carácter anodino del foxismo, el conservadurismo incapaz del PAN, los anhelos de restauración del priísmo y el copamiento del PRD por otras facciones del PRI que han tomado el registro y las siglas de la Revolución Democrática como pista de lanzamiento. Decenas de candidaturas de priístas en el PRD son prueba elocuente de la entrega del registro, no de apertura ciudadana.

Hartas de entregar candidaturas mediante encuestas falsas, violar convocatorias y gastar dinero en precampañas, la burocracia entreguista que dice representar al PRD abre el camino a los sectores de la derecha.

En este aire podrido de la política nacional, el replanteamiento e introducción en el debate del tema de los principios y del proyecto nacional que unificó a los sectores democráticos en 1988 se convierte en la tarea central de la convención.

La misión de este acontecimiento, a celebrarse en octubre, consiste en la doble tarea de contribuir a la reconstrucción de un frente amplio nacional y rescatar las siglas del PRD. La justicia frente a los actos de traición e ilegalidad deberá configurar una nueva realidad estatutaria que tendrá que pasar por la reflexión sobre las trampas que hicieron del PRD un minisistema de partidos dentro del partido, controlados mediante el usufructo de las prerrogativas.

La convención es el rescate de las historias que la burocracia perredista ha usurpado. Rescatar los principios contra las secuelas del viejo régimen y la cultura priísta que absorbió por entero la conducción del PRD. Rescatar las bases ideológicas y todos los nutrientes de pensamiento político progresista que llegaron hasta la fundación del PRD. Rescatar por ello el cardenismo, los aportes de las corrientes socialistas y comunistas en la organización de los movimientos sociales. Rescatar el pensamiento por un Estado democrático y soberano. Rescatar el instinto de independencia y la voluntad para rescatar al país de la abyección y el mercantilismo global. Rescatar los anhelos y los sacrificios de miles de luchas nacionales y locales que durante los últimos cuarenta años desembocaron en su mayoría en el PRD.

Rescatar la identidad y la convicción de nuestras ideas. Rescatar los propósitos de ser eficientes y democráticos, fraternales, solidarios. Rescatar la idea del cambio y la voluntad de ser vanguardia en las transformaciones que la nación necesita. Rescatar nuestra unidad con base en propósitos y no sólo negar otras propuestas por falta de ideas propias.

Rescatar la necesidad de ser punta de lanza para unificar a los mexicanos en esa marcha por recuperar la dignidad, la economía interna, el valor del trabajo, la conciencia en los derechos y el cumplimiento con las obligaciones.

Los priístas en su descomposición deben hacer sus propios partidos. La ocupación del PRD es inmoral y corrompe la política. Si el propósito es hacer un nuevo partido con los grupos que se han apoderado del PRD, éstos deben buscar su propio registro y no el que representa las historias de quienes lucharon contra el PRI y lo derrotaron en el campo de las ideas, en las tribunas públicas, en la ciencia, en la academia, en la cultura, en las calles, en la defensa de los derechos sociales, en el respeto a la soberanía, en la democratización de la política y la lucha contra los monopolios de los medios de comunicación.

La convención es una convocatoria a un acto soberano de los que formaron parte del movimiento que hizo el Partido de la Revolución Democrática. Es un punto de inflexión entre la traición y la recuperación de la dignidad política, creando dos opciones: quiénes corrompieron al PRD o con nuestra conciencia.

Es una lucha por el registro legal y una corrección de fondo, haciendo justicia política. La convención se organiza por sus propios integrantes. Es un acto autocrítico, porque en el fondo y en diverso grado, todos somos culpables.

No renunciar al PRD es rescatar nuestras propias historias e identidades, pues hoy se necesita de todas las experiencias, de todo el conocimiento, de todos los esfuerzos para rescatar no sólo al PRD, sino al país, liberarlo y reconstruirlo. La convención es un llamado a filas, no una negociación; no es una transacción ni es para pactar con los que lo han traicionado.

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año
La Jornada
en tu palm
La Jornada
Coordinación de Sistemas
Av. Cuauhtémoc 1236
Col. Santa Cruz Atoyac
delegación Benito Juárez
México D.F. C.P. 03310
Teléfonos (55) 91 83 03 00 y 91 83 04 00
Email
La Jornada
Coordinación de Publicidad
Av. Cuauhtémoc 1236 Col. Santa Cruz Atoyac
México D.F. C.P. 03310
Informes y Ventas:
Teléfonos (55) 91 83 03 00 y 91 83 04 00
Teléfonos Directos: (55) 56884840, 56886167
Email