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México D.F. Domingo 8 de junio de 2003

Otro militar de origen mexicano fallece en ataque en Tikrit; hay cuatro heridos

Continúa la resistencia armada iraquí contra las tropas de Estados Unidos

Expertos de la AIEA comenzaron a inspeccionar una instalación nuclear que fue saqueada

AFP Y REUTERS

Bagdad, 7 de junio. Un nuevo ataque contra las tropas estadunidenses en Irak dejó hoy un militar muerto e hirió a otros cuatro cerca de Tikrit, 180 kilómetros al noroeste de Bagdad, mientras expertos de la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) co-menzaron su inspección en el centro nuclear de Al Tuwaitha, saqueado después de la caída del régimen de Saddam Hussein.

El soldado fallecido fue identificado co-mo Anastasio Haro Marín, proveniente de Momax, Zacatecas, de 27 años de edad, el cuarto soldado mexicano que perece desde el comienzo de la guerra en Irak.

Tikrit es el antiguo bastión de Hussein, precisó el centro de comando estadunidense en Qatar. Los soldados heridos fueron trasladados en helicóptero a recintos médicos militares en esta zona; sus nombres y cargos no fueron dados a conocer.

La misión de los expertos de la AIEA en el depósito nuclear de Al Tuwaitha, cerca de Bagdad, que durará dos semanas, se inscribe dentro del Tratado de no Proliferación Nuclear y no responde a resoluciones de la Organización de Naciones Unidas (ONU) sobre el desarme de Irak.

Los siete expertos de la AIEA, que llegaron el viernes, deben verificar si desaparecieron materiales radiactivos durante los saqueos efectuados al finalizar las operaciones militares.

Se trata del primer equipo de inspectores que regresa a Irak desde que los expertos de la ONU encargados de determinar si había allí armas de destrucción masiva abandonaran el país en vísperas de la guerra.

Las fuerzas angloestadunidenses fueron duramente criticadas por no haber impedido los saqueos en Al Tuwaitha, pero uno de sus portavoces minimizó los supuestos riesgos de contaminación.

Los habitantes afirmaron a Afp que los saqueadores vaciaron barriles con productos químicos indeterminados. Esos contenedores luego fueron vendidos a gente que los utilizó para almacenar agua y alimentos tras haberlos lavado en el río Tigris.

Este saqueo tuvo como consecuencia ha-ber expuesto a ciudades y pueblos enteros a contaminación radiactiva. Los habitantes manifestaron su temor de ver morir a sus familias y sus hijos.

Asimismo, otra fosa común fue encontrada en la localidad iraquí de Salman Pak, al sur de Bagdad, donde antes había un complejo militar. Familiares de desaparecidos comenzaron a excavar en el lugar y recuperaron al menos cinco cuerpos.

Pobladores de la zona dijeron que en abril anterior ayudaron a sepultar más de cien cadáveres en el complejo militar y creen que muchos de ellos se encuentran ocultos en niveles más profundos.

Añadieron que las víctimas eran jóvenes que murieron cuando empezó la invasión liderada por Washington, informó la BBC .

Dudas de expertos

Por otra parte, algunos de los analistas de inteligencia de alto rango que examinaron los remolques iraquíes sospechosos de haber sido usados para fabricar armas biológicas dudaron que esto fuera cierto, re-portó este sábado el New York Times.

Al menos tres equipos de especialistas occidentales han inspeccionado los remolques y muestras extraídas de ellos, dijo el periódico. Los dos primeros consideraron que los camiones fueron usados para fabricar armas biológicas, pero el tercero, de analistas más experimentados, está dividido.

Estados Unidos señaló el descubrimiento de los remolques, que describió como laboratorios biológicos móviles, como prueba de que Hussein tenía armas de exterminio pero pudo destruirlas antes de la invasión.

El gobierno del presidente George W. Bush aludió a la supuesta amenaza inminente de los programas de armas biológicas, químicas y nucleares de Bagdad como la principal justificación para el derrocamiento de Hussein, pero a ocho semanas de terminadas las operaciones militares las fuerzas estadunidenses aún no han encontrado las supuestas armas de exterminio.

Los analistas no identificados que dudaron de que los remolques hayan sido utilizados para preparar agentes bacteriológicos señalaron que las plantas carecían de equipos para esterilización de vapor, lo cual es necesario para fabricar armas biológicas, indicó el periódico The New York Times.

Incluso si este paso se hubiera pasado por alto, cada unidad habría podido preparar solamente una pequeña cantidad de agentes bacteriológicos, los cuales debían ser ulteriormente procesados en otra fábrica para concentrarlos y prepararlos para su uso en armas, reportó el diario.

Además, los camiones carecen de una forma simple para remover los fluidos con gérmenes del tanque de procesamiento, agregó el Times, que citó a los analistas disidentes, que fueron estacionados en Medio Oriente, Gran Bretaña y Estados Unidos.

En este sentido, el director de la agencia de inteligencia del Departamento de Defensa estadunidense, vicealmirante Lowell Ja-coby, indicó que nunca hubo dudas sobre la existencia de armas de destrucción masiva.

De esta manera, Jacoby salió al paso de versiones que indicaron que un informe de su área aseguraba que no había pruebas fiables de que el régimen de Hussein fuera a producir o almacenar armas prohibidas, e indicó que se sacó de contexto del documento elaborado por su agencia.

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