Cifran en 2.1 millones los votos perdidos por el sol azteca de 1997 a la fecha

Exige grupo la renuncia del CEN perredista

RENATO DAVALOS

El grupo perredista encabezado por Marco Rascón, Salvador Nava y Oscar Moreno exigieron la renuncia del Comité Ejecutivo Nacional del sol azteca tras los resultados electorales, y pidió la conformación de un comité provisional que llame a un Congreso para "rescatar el partido". Si Rosario Robles no hace honor a la palabra que empeñó, la perseguiría por siempre el descrédito y estaría convocando a una rebelión en el PRD, sostuvo Moreno.

Anunciaron que el próximo se celebrará la asamblea promotora de la Convención Nacional por la Revolución Democrática, que se efectuará el 23, 24 y 25 de octubre, previa a un congreso en marzo de 2004.

El triunfalismo de la burocracia y la dirección del PRD, señalaron, arrastra todas las formas de ilegalidad y defraudación interna. Sus decisiones sirvieron para imponer candidatos, hoy diputados electos, que pretenden entregar el registro perredista a nuevos grupos al servicio del salinismo y a priístas aventureros, dijeron en un documento titulado Propuesta de rescate y unidad del Partido de la Revolución Democrática.

La actual directiva es incapaz de conducir el proceso de reforma interna. En la misma tesitura se encuentra el Consejo Nacional, dijeron. Ambas instancias ocultaron el informe de la Comisión para la Legalidad que "documentó la defraudación de la última elección interna de marzo de 2002" a la que este año se sumaron "ilegalidades en la selección de candidatos". De la elección de 1997 a la del domingo anterior, señala el documento, el PRD perdió 2 millones 100 mil votos. Su avance "se monta sobre la base del alejamiento con la ciudadanía de las urnas y el festejo es un acto de cinismo ante el debilitamiento del sufragio".

Las declaraciones de Robles definiéndonos como marginales, recordó Rascón, me recordaron a la actitud del PRI de 1987, cuando surgió la Corriente Democrática. Rememora la frase de Mario Ruiz Massieu "adalid reclutado por ellos", cuando se refirió al movimiento universitario como "minoría ruidosa", terció Moreno. La actual directiva ha permitido la entrada de la "peor ralea de los priístas", completó Nava.

En las actuales circunstancias, coincidieron, no hay condiciones en el PRD para la contienda de 2006. Particularmente, señalaron que liderazgos como los de Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés Manuel López Obrador tienen que aportar a la gran reforma que reclama la organización que "no es un partido, sino un remedo; el tiempo de las corrientes ya terminó y no puede extenderse el autismo del consejo y del comité", apuntó Rascón.

No aceptamos el trato de corriente

La movilización que hemos emprendido desde el 5 de mayo no pretende porcentajes o candidaturas, aclararon. "ƑCómo se pretende definir 10 candidatos a gobernadores el próximo año, si el PRD tiene presencia apenas en siete entidades?", preguntó Nava. En los estados no hay comités, sino "grupúsculos que usufructúan la participación de las corrientes. No hay auditorías ni nada".

Preocupa mucho la renuncia de Gilberto López y Rivas, estableció Moreno. Queremos que retorne la simpatía de intelectuales como Elena Poniatowska, Carlos Monsiváis y José Emilio Pacheco. Estamos frente a una dirección perredista que no consulta, que abusa, pisotea y que ha vendido el proyecto. No nos vamos a rendir e incluso "invito a Rosario a que nos expulse".