El PRD contabiliza 51 y Alianza para Todos 41

Con 260 distritos computados el PRI se adjudica 102; AN lleva 60

MIREYA CUELLAR Y ALONSO URRUTIA

Al concluir anoche el cómputo de los votos en 260 de los 300 distritos electorales del país, el PRI se había adjudicado 102 de ellos, el PAN 60, el PRD 51 y la Alianza para Todos 41, de los cuales 3 son del Partido Verde Ecologista de México. A las 22:25, cuando se había computado 97.92 por ciento de las casillas (en algunas el cómputo aún sigue), que suman 118 mil 847, se había sumado 26 millones 308 mil 528 votos.

Con ese 97 por ciento de casillas computadas el PAN tenía 8 millones 68 mil 607 votos (30.67 por ciento); PRI, 6 millones 113 mil 223 (23.24 por ciento); Alianza para Todos, 3 millones 580 mil 665 (13.61 por ciento); PRD, 4 millones 631 mil 509 (17.6 por ciento); PT, 633 mil 818 (2.41 por ciento); Verde Ecologista, 1 millón 52 mil 319 (4 por ciento) y Convergencia, 592 mil 428 (2.25 por ciento).

El Partido de la Sociedad Nacionalista ni siquiera tuvo como votantes el número de militantes que se le exigen a una organización para obtener el registro de partido; anoche había acumulado 71 mil 306 votos (0.27 por ciento), cuando el mínimo necesario es de 77 mil afiliados para poder contender en las elecciones.

México Posible tenía 239 mil 659 sufragios (0.91 por ciento); Alianza Social, 195 mil 705 (0.74 por ciento); el Liberal Mexicano, 105 mil 163 (0.40 por ciento), y Fuerza Ciudadana, 122 mil 403 (0.47 por ciento). Se habían acumulado 885 mil 651 votos nulos y 16 mil 072 para candidatos no registrados.

A los partidos que no obtuvieron 2 por ciento de la votación que exige la ley para mantener el registro, les será retirado formalmente una vez que haya concluido el periodo de impugnaciones y la Junta General Ejecutiva del IFE emita el acuerdo correspondiente. Los estados que ha-bían concluido sus cómputos son: Aguascalientes, Baja California Sur, Guerrero, Nayarit, Nuevo León, Sinaloa, Tlaxcala, Yucatán, Tamaulipas, Querétaro, Zacatecas y Quintana Roo.

En un grupo de 15 estados se había computado ya más de 90 por ciento de los distritos y se esperaba que en la madrugada concluyeran. Los distritos cuyos resultados tendrán mayor demora son los de Pánuco, Veracruz; Zamora, Michoacán; Celaya, Guanajuato, y San Luis Río Colorado, en Sonora, donde se abrirían algunos paquetes electorales para hacer el conteo boleta por boleta.

Aunque en algunos distritos la votación estaba muy cerrada, como el de Boca del Río, en Veracruz, que el PRI se adjudicó apenas por una diferencia de 400 votos al cierre de esta edición, la expectativa era que se confirmarían las cifras del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP). Es decir, el PRI ganaría en 159 distritos, el PAN en 83, el PRD en 55 y el Partido Verde Ecologista de México en 3, mientras que el PT y Convergencia no habrían concretado ninguna victoria por la vía uninominal.

Con los porcentajes de votación mencionados, el tricolor tendría derecho a 64 diputados de representación proporcional; el blanquiazul a 71; el sol azteca a 41 y el Verde a 14, mientras que el PT y Convergencia a 5, respectivamente.

Sumados, la conformación de la Cámara de Diputados sería la siguiente: 223 legisladores para el PRI, 154 para el PAN, 96 para el PRD, 17 para el Verde Ecologista y cinco para cada uno de los otros dos partidos.

El PRI obtuvo 159 diputaciones de mayoría y no 162, como ese partido dijo en primera instancia, dado que tres de los candidatos registrados por la coalición parcial que hizo con el PVEM, y que ganaron, son de éste último partido y formarán parte de la fracción verde en la próxima legislatura. Estos tres diputados son uno de Chihuahua y dos del estado de México.

Además de haber obtenido carro completo en cinco estados del país, en otras entidades el PRI logró la mayoría absoluta. En Durango, con 52.68 por ciento de la votación en su favor y el triunfo en los cinco distritos en disputa, ubican a esta entidad como la más priísta del país. En Nuevo León, el desplome del blanquiazul, producto de la censura electoral a su gobierno y sus pugnas intestinas, hicieron que el PRI alcanzara 50.11 por ciento de los votos y sólo perdiera uno de los 11 distritos en disputa.

Sinaloa, es la otra entidad donde el PRI alcanzó más de la mitad de los votos, al ubicarse en 50.73 por ciento, aunque perdió uno de los ocho distritos. Otros estados donde el respaldo al tricolor fue más acentuado fueron: Nayarit -gobernado por el PAN-, con 48.65 por ciento; Tabasco, con 47.76; Chihuahua, con 46.29, e Hidalgo, con 46.15 por ciento. Cabe destacar que en estas entidades los priístas ganaron todos los distritos en disputa.

La entidad que sigue siendo la menos priísta es la capital del país, donde el PRI obtuvo solamente 11.73 por ciento de los votos y de nueva cuenta no ganó un solo distrito. Baja California, Baja California Sur y Zacatecas son los otros tres estados donde el PRI no ganó ningún distrito.

Respecto del PAN, su mayor retroceso lo marcó el desplome de este partido en cuanto a las victorias en el ámbito distrital. En comparación con el año 2000 y el efecto Fox, tuvo 40 por ciento menos de triunfos de mayoría relativa al pasar de 142 distritos a 83.

Un desglose de la votación panista ubica el principal retroceso de este partido en gran parte de las entidades con un mayor número de votantes: Coahuila, Chihuahua, Jalisco, estado de México, Nuevo León y Distrito Federal.

Si bien en esta última entidad obtuvo 25.71 por ciento de los sufragios, es en la propia capital del país donde el PAN registró el mayor retroceso en cuanto a victorias distritales, pues las tres diputaciones que obtuvo contrastan con las 24 alcanzadas en 2000. Esto es, 21 de los 59 distritos electorales que perdió esta vez el PAN.

En Jalisco el panismo tuvo un retroceso de nueve distritos respecto de 2000, al igual que en Nuevo León. Por lo que hace al estado de México, Acción Nacional obtuvo seis distritos menos y cinco más en Coahuila.

Por lo que hace a las entidades con menor presencia del blanquiazul, sobresalen los casos de Guerrero, con 6.03 por ciento de los votos, y Tabasco, con 6.14. Otras entidades con escasa presencia del blanquiazul fueron Tlaxcala, con 12.03 por ciento, y Zacatecas, con 12.34.

El PRD concentró casi la mitad de su votación en tres entidades: Distrito Federal, Michoacán y el estado de México, donde alcanzó 2 millones 248 mil 389 votos de los 4 millones 631 mil 223 votos que sumó en todo el país. En contraste, en 14 estados el partido del sol azteca obtuvo menos de 9 por ciento de la votación y en siete fue la cuarta fuerza electoral.

El principal retroceso del PRD ocurrió en Quintana Roo, donde fue relegado hasta la quinta posición, sólo delante del PT y todos los partidos que perdieron el registro. Es decir, PVEM y Convergencia tuvieron más votantes que el PRD.

Los casos de Nuevo León y Campeche fueron de los más críticos para el perredismo, debido a que en esos estados sólo obtuvo 2.11 y 2.45 de los sufragios, respectivamente. En Campeche, la corriente encabezada por la ex perredista Layda Sansores -hoy militante de Convergencia- obtuvo cuatro veces más votos. Y en Nuevo León el PT casi triplicó la votación perredista.

Gran parte de la "recuperación" del PRD fue, en realidad, efecto de la popularidad del jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, pues de haber obtenido 26 victorias distritales en 2000, ahora alcanzó 55, destacando que en la capital pasó de seis distritos en 2000 a 27.

En cuanto al PVEM, destaca que en cuatro entidades del país se convirtió en la tercera fuerza electoral: Baja California, Coahuila y Jalisco, donde obtuvo votaciones de 9.94 por ciento, 6.35 y 8.32 por ciento, respectivamente. Sin embargo, sobresale el caso de Quintana Roo -donde gobiernan la ciudad de Cancún- pues alcanzó 12.32 por ciento de los votos.

Más allá de los estados en donde fue en coalición con el PRI, otras entidades donde el PVEM tiene presencia son: Distrito Federal (8.35 por ciento); Chiapas, (8.04) y Michoacán (7.76 por ciento).