Cifra récord; equivale a 77 por ciento de los ingresos por exportaciones de petróleo

Mexicanos que trabajan en EU enviaron mil 195.10 mdd en mayo

Las remesas se consolidan como una de las fuentes principales de divisas para el país, según cifras del Banco de México Iniciativas para que se inviertan en proyectos que generen empleos

ROBERTO GONZALEZ AMADOR

El monto de las remesas de dinero de trabajadores mexicanos que residen en Estados Unidos logró en mayo un nuevo récord, por segundo mes consecutivo, al alcanzar mil 195.10 millones de dólares, cifra superior en 31 por ciento a la del mismo periodo de 2002, informó este miércoles el Banco de México.

Las remesas que llegaron al país en mayo pasado fueron equivalentes a 77 por ciento de los ingresos que obtuvo México en ese mismo mes por la exportación de petróleo crudo, que sumaron mil 549 millones de dólares, de acuerdo con indicadores de Petróleos Mexicanos (Pemex).

El valor de las remesas de los trabajadores mexicanos residentes en Estados Unidos superó por primera ocasión en abril pasado la barrera de los mil millones de dólares mensuales, al ubicarse en mil 57.6 millones. En mayo volvió a establecer una nueva marca, con mil 195.1 millones, y consolidarse como una de las fuentes de divisas más estables para el país.

A diferencia de los ingresos generados por la exportación de petróleo, de los que una parte debe ser reinvertida en las actividades propias de la explotación del hidrocarburo, las divisas captadas por remesas se convierten prácticamente en su totalidad en gasto para las familias de los trabajadores mexicanos que residen en Estados Unidos. En los pasados dos años, desde la administración federal se han lanzado varias iniciativas que involucran al gobierno y al sector privado para que los recursos de las remesas no sean empleados sólo en gasto de consumo, sino también en proyectos de inversión para generar fuentes de empleo y contener la expulsión de trabajadores a Estados Unidos.

Hace dos semanas, el gobierno federal aseguró que los recursos que ingresaron al país por remesas son uno de los factores que han contribuido a la reducción de la pobreza.

De acuerdo con la información reportada ayer por el Banco de México, entre enero y mayo de este año el ingreso de remesas familiares alcanzó 4 mil 993.87 millones de dólares, cantidad superior en 28.29 por ciento a la registrada en similar periodo de 2002, cuando alcanzaron 3 mil 892.57 millones de dólares.

Según datos de Pemex, en el periodo comprendido entre enero y mayo de este año el valor de las exportaciones de petróleo crudo ascendió a 6 mil 894 millones de dólares. Ello significa que el valor de las remesas familiares durante los primeros cinco meses de 2003 fue equivalente a 72.43 por ciento de las divisas que obtuvo el país por la venta de crudo al exterior.

El Banco de México reportó que entre enero y mayo pasados el monto de remesas que llegó al país por medio de transferencias electrónicas alcanzó 4 mil 284.72 millones de dólares, cantidad que representó 85.79 por ciento del total del ingreso de divisas por este concepto. Otros 611.22 millones de dólares, 12.23 por ciento del total, fue remitido por medio de un instrumento llamado money order y el resto mediante cheques personales, efectivo y especie.

Transferencias electrónicas

En los primeros cinco meses de este año, el número de remesas totales fue de 16.08 millones -generalmente, cada trabajador envía en promedio una remesa a sus familiares cada mes-, de las cuales 14.20 millones de operaciones correspondieron a transferencias electrónicas, 1.74 millones a money orders y las restantes a cheques personales, efectivo y en especie.

El Banco de México precisó que, en promedio, cada remesa de dólares de un trabajador mexicano residente en Estados Unidos a sus familiares aquí fue de 310.61 dólares.

En los pasados años aumentó el uso de medios electrónicos para realizar las operaciones de transferencia de remesas. Bajo esta modalidad, las entidades bancarias, que son las que realizan prácticamente la totalidad de las transacciones, cobran una comisión de entre 10 y 15 dólares por cada envío que no supere 600 dólares.

Hasta antes de que se extendiera el uso de medios electrónicos, los trabajadores mexicanos en Estados Unidos que enviaban dinero a sus familiares pagaban hasta 50 dólares por operación. Actualmente bancos mexicanos tienen convenios con instituciones bancarias estadunidenses que permiten la disposición de las remesas en cajeros automáticos con una simple tarjeta de débito.