Miles protestan contra la ocupación

Alrededor de 10 mil personas se manifestaron ayer en Madrid para exigir el fin de la ocupación militar de Irak y denunciar el carácter "empresarial" y "mangante (ultraje)" de la conferencia de donantes que se inició al amparo del gobierno del derechista José María Aznar, uno de los mandatarios que apoyaron sin restricciones la invasión angloestadunidense del país árabe.

El lema de la pancarta que presidió la protesta era claro: "Conferencia de donantes: saqueo de ocupantes. Fuera las tropas invasoras de Irak", idea que se repitió a lo largo de la protesta, a la que se sumaron colectivos sindicales, sociales y de derechos humanos, que exigieron la inmediata restauración de la legalidad internacional y el desalojo de los ejércitos ocupantes.

Bajo un severo dispositivo policial -más de 40 furgones de agentes antidisturbios vigilaron la protesta-, los manifestantes criticaron a los gobiernos impulsores de la ocupación, a los que calificaron de "terroristas" y "fascistas", y reclamaron el "renacimiento de la ONU", a la que acusaron de "legitimar" la política de "barbarie" que ejercen Estados Unidos y Gran Bretaña.

La manifestación transcurrió sin incidentes desde la estación de Atocha a la Puerta del Sol, donde se leyó una declaración de organizaciones participantes, como la Plataforma de la Cultura contra la Guerra, la Confederación General de Trabajadores y el Comité de Solidaridad Español con la Causa Arabe, entre otras.

La manifestación también asumió como propia la declaración hecha por diversas organización internacionales integradas en el denominado Occupation Watch Irak, en la que se exige la creación de un "observador internacional para hacer un seguimiento en el terreno de los crímenes perpetrados por la ocupación y denunciarlos", al tiempo que piden que se rechace la donación de fondos si estos van a estar administrados por los gobiernos ocupantes.

Amnistía Internacional exigió que la reunión tenga como "criterio fundamental" la necesidad de "garantizar el respeto a los derechos humanos", y reclamó para el pueblo iraquí soberanía en los criterios que determinarán la "reconstrucción, la inversión extranjera y la venta de bienes estatales". ARMADO G. TEJEDA, CORRESPONSAL