"Hay una situación crítica de corto plazo": Lavagna

La crisis energética frenará el crecimiento de Argentina

AFP

Buenos Aires, 16 de mayo. La crisis energética que sufre Argentina causará impacto negativo sobre la tasa de crecimiento del país, admitió el ministro de Economía, Roberto Lavagna, en declaraciones exclusivas este domingo al diario Clarín.

"La crisis va a tener algún efecto, no cabe ninguna duda. Eso probablemente se va a reflejar en los indicadores de mayo. Pero la tasa de crecimiento mínima este año será de 5.5 por ciento", indicó el jefe de la cartera económica.

Lavagna expresó que "en términos de producto interno bruto (PIB) es difícil de decir" cuánto daño causará el déficit de producción y abastecimiento que denuncian las empresas privadas que controlan el sector.

Argentina creció con fuerza 8.7 por ciento en 2003, en una abrupta reacción a la peor caída de la historia sufrida en 2002, con 10.9 por ciento de retroceso en el PIB, como corolario de cuatro años de una recesión que se hacía cada vez más profunda.

Pero el ministro afirmó que la evolución de la crisis "depende, incluso, de cuestiones climáticas o de si va a haber o no agua en las represas" hidroeléctricas.

La emergencia se había originado en el sector gasífero, que venía demandando aumentos de tarifas para ponerlas al nivel de los precios internacionales en dólares, a pesar de que la moneda se devaluó 65 por ciento desde 2001.

El jefe de la política económica advirtió, no obstante, que "no hay que mezclar cosas coyunturales con cosas estructurales. Es obvio que esto es un traspié, un inconveniente, pero que no tiene magnitud de mediano plazo".

"Argentina no es un país que deba tener problemas de energía, porque ha sido exportador de energía. Y nuestra oferta es una restructuración de deuda, con cuestiones de largo plazo que demandan 25 o 30 años", indicó.

La debilidad interna forzó al gobierno a establecer duros recortes a sus exportaciones de gas a Chile, lo que provocó una situación áspera en las relaciones con el gobierno del país vecino.

También obligó a las autoridades a comprar combustibles a Venezuela y a comprar gas de Bolivia, en una crisis que cobró dimensión regional en el otoño, sin haber atravesado aún el periodo crítico del invierno, cuando la demanda se incrementará.

"Hay una situación crítica de corto plazo que nos cuesta en términos de nivel de producción, en precios en algunos sectores, en retrasos en entrega de insumos en la industria de la construcción", añadió Lavagna, al reconocer el costo social de la crisis por despidos y suspensiones en el ámbito fabril.

Consultado sobre si la decisión de lanzar una empresa estatal de energía y petróleo no es una mala señal para los inversores, lo negó.

Lavagna invitó a fijarse "la diferencia que existe con México y Brasil, que a través de sus empresas petroleras de Estado captan la renta extraordinaria del alza del petróleo. ƑPor qué los argentinos no podemos tenerlas y debemos ceder todo a intereses privados?"

Analistas señalaron que Argentina sufrirá turbulencias económicas si se ahonda la inestabilidad en Brasil o crece la tasa de interés en Estados Unidos, justo cuando intenta restructurar una astronómica deuda en mora, pero no se vislumbran escenarios de crisis.