Factor de retraso, usar recursos en acciones que no alientan el crecimiento, refirió

Deuda externa, lastre para los países de AL, señaló el Foro Económico Mundial

REUTERS

Nueva York, 15 de octubre. Muchos países latinoamericanos siguen sufriendo por el legado de préstamos adquiridos con premura y altos déficit presupuestarios, pese a que sus economías están creciendo aceleradamente, señaló el viernes el Foro Económico Mundial (FEM).

"Hay gobiernos que están lastrados por la deuda y ese es un problema serio en todas partes en América Latina (AL)", dijo Augusto López Claros, jefe de Economistas y director del Programa de Competitividad Global del FEM.

La Comisión Económica de Naciones Unidas para América Latina y el Caribe espera que la región crezca 4.5 por ciento este año -el más acelerado desde 1997- gracias a una fuerte demanda de sus materias primas, particularmente por China y Estados Unidos.

El Foro Económico Mundial, cuerpo independiente, elogió los éxitos económicos regionales de Chile en su informe anual sobre competitividad anual publicado el miércoles.

Pero presentó un panorama más sombrío para el resto de América Latina, diciendo que a la par de haber razones para el optimismo sobre la región, otras zonas estaban mejorando mucho más rápidamente.

López Claros dijo que pedir prestado a los mercados y a los organismos multilaterales de crédito por gobiernos que destinan los fondos a usos que no alientan el crecimiento ha sido uno de los principales factores de retraso de la región.

"Se emite un bono a 30 años que se tiene que pagar durante los próximos 30 años" , dijo. "Mejor asegurarse que si uno se financia por medio de bonos, se va a usar el dinero de forma que vaya a generar los recursos para pagar la deuda en el futuro", agregó.

"La gran mayoría de los países en América Latina no están haciendo esto", dijo. "Emiten deuda, generan déficit y no hay mucho crecimiento que crear como resultado de esos niveles altos de gasto", afirmó.

López Claros dijo que los subsidios gubernamentales a productos básicos, que van desde el trigo hasta la gasolina, son un ejemplo de préstamos mal gastados, pese a que la mayoría de los subsidios tienen el propósito de proteger a los pobres de los vaivenes de los precios del mercado.

"Eso está completamente mal dirigido", dijo el economista del fondo. "A lo que lleva es a que la gente malgaste los recursos, consuma excesivamente gasolina y gas y crea que nadie está pagando por ello. "Naturalemente que no es así. Lo están pagando y sus hijos lo harán también", agregó.

Destacó los subsidios gubernamentales al gas natural producido localmente en su natal Bolivia como un ejemplo de un gasto deficitario mal dirigido.

Explosión de deuda

López Claros señaló que estaba preocupado acerca de una "explosión de deuda" entre los países centroamericanos y del Caribe.

Dijo que había incluso casos en que se necesitarían leyes que eviten que los gobiernos emitan bonos que venzan mucgo después de un periodo presidencial, lo que haría que los gobiernos pensaran más acerca de las deudas que asuman.

"Se dice soy el presidente y voy a durar cuatro o cinco años", dijo. "ƑPor qué no emitir un bono a 20 años; no voy a tener que estar pagándolo".

"Que piensen que va a llegar el día en que tengan que dar cuenta de estas cosas... y eso llevaría a un cambio de mentalidad", agregó.

Las tablas del Foro Económico Mundial que muestran caídas de los países latinoamericanos en términos de competitividad global son un sorpresa ante el optimismo de Wall Street acerca de la salud económica de la región y especialmente de su mayor economía: la brasileña.

El presidente Luiz Inacio Lula da Silva, temido anteriormente como un peligroso candidato izquierdista que llevaría a un incumplimiento de pagos de la deuda brasileña, es altamente admirado ahora en Wall Street por un vuelco en las cuentas fiscales de su país y por el pago de sus obligaciones.

López Claros dijo que Lula está en el camino fiscal adecuado, pero Brasil tendrá que destinar grandes sumas de dinero, por lo menos en una generación, al pago de la deuda. Agregó que malos préstamos lo estaba retrasando en comparación con otros países.

Eso debería constituir una advertencia para otras naciones, dijo.

"Tienen esa gran deuda que deben amortizar y pagar, que limita hoy como en años pasados la capacidad del gobierno de mejorar la educación, la infraestructura, la distribución de ingresos y la salud pública", agregó