Una complicación cardiorrespiratoria segó ayer la vida de la actriz, de 83 años
Murió Ofelia Guilmain, la escena mexicana pierde uno de sus pilares
Participó en decenas de obras de teatro, filmes y telenovelas; lo mismo hacia reir que llorar y hasta atemorizar a su público Se tenía previsto este año rendirle homenaje en Bellas Artes
La primera dama de la escena mexicana Ofelia Guilmain, murió ayer a las 6:30 horas a causa de una complicación cardiorrespiratoria; la actriz fue dueña de una personalidad dominante que supo explotar en teatro, cine y televisión, lo que la convirtió en una de las leyendas de la actuación en nuestro país. Guilmain hizo prácticamente todo el teatro clásico, trabajó bajo la dirección del cinerrealizador Luis Buñuel en Nazarín y El ángel exterminador; y bajo las órdenes del poeta Salvador Novo en las obras Trece a la mesa y Ocho columnas.
En una entrevista que dio a La Jornada, la actriz mencionó: "Ya no me falta una corona que ponerme de las reinas del teatro clásico: Isabel de Inglaterra, María Tudor, Isabel la Católica, Catalina de Aragón... de España, Inglaterra, Suecia, de todos lados... Además hice Hécuba, Medea, Lisístrata, Electra, Antígona... casi todas las griegas me las he echado. Ahora no tengo ya casi nada nuevo que decir, ya todo lo he dicho''.
Ofelia Puerta Guilmain, su nombre completo, nació en Madrid, España, el 17 de noviembre de 1921, lugar donde realizó sus estudios básicos. Sus inicios actorales se dieron durante la Guerra Civil Española (1931-1939), en las llamadas Guerrillas del teatro; sin embargo, tras la muerte de uno de sus hermanos, ella y su familia se vieron obligados a abandonar su país en 1939, al comienzo de la dictadura franquista.
En ese mismo año llegó a México, que la adoptó de manera definitiva y donde germinó con su carrera actoral. En 1940 debutó en el Palacio de Bellas Artes, con la obra de teatro Mujeres. Un año más tarde la actriz contrajo matrimonio, por lo que decidió apartarse de los escenarios por 11 años.
Mujer de teatro
Su regreso al medio fue con ímpetu, participando en obras del teatro universal con las que demostró sus grandes dotes histriónicas.
Entre los personajes que encarnó se pueden citar a Electra, Yocasta, Doña Inés, La Celestina, Medea y Bernarda Alba, por mencionar algunos.
A lo largo de su carrera, la primera actriz interpretó más de 100 obras de todo género, desde teatro trágico griego hasta clásico contemporáneo.
En este ámbito, al decir de sus cronistas, las obras más memorables en las que participó son: Yerma, La Celestina, Miércoles de ceniza, El malentendido, La discreta enamorada, Los caballeros de la mesa redonda, Las troyanas, Fuente ovejuna y La ronda de la hechizada.
Asimismo, destacó su actuación en Isabel de Inglaterra, La maestra bebe un poco, Ifigenia cruel, La deliciosa comedia, La casa de Bernarda Alba, donde encarnó el papel protagónico, y en fechas recientes en Los monólogos de la vagina.
En 1968, impactado por su destacada actuación, el dramaturgo Hugo Argüelles escribió la obra teatral La ronda de la hechizada, pensada especialmente para Ofelia Guilmain.
En el cine
Su carrera fílmica, que inició en 1941, fue igual de destacada que la de teatro. Inició con la película El capitán centella, a la que le siguieron Flor de fango (1942); Mi desconocida esposa (1958); Nazarín (1958); El hombre y el monstruo (1958); Quinceañera (1960); Divorciadas (1961) y Barón del terror (1962).
De 1963 a 1966 participó en una docena de películas, tales como: Doña macabra, Casa de vecindad, Juicio de almas, Jinete justiciero, Llamada urgente, Aquella Rosita Alvírez, Casa de huéspedes, Pánico, Sangre en río Bravo y El escapulario.
Considerada una actriz polifacética, Guilmain logró hacer que el público reaccionara de acuerdo con lo que interpretaba, desde risa y miedo, hasta llanto.
Lo mismo participó en cintas de corte dramático como Por qué nací mujer (1968), que en musicales como Sor ye yé (1967), infantiles como Caperucita y Pulgarcito contra los monstruos (1962) o cómicas como El patrullero 777, al lado del también inolvidable Mario Moreno, Cantinflas, rodada en 1977.
Su filmografía aglutina alrededor de 70 películas, dirigidas algunas por Luis Buñuel y Felipe Cazals, en las que trabajó al lado de figuras tan importantes como Silvia Pinal, Marga López, Ignacio López Tarso, Servando González y José Estrada.
Pionera de la televisión
Ofelia Guilmain, una de las pioneras de la televisión en México trabajó al lado de Angel Garaza en un melodrama que se transmitía los domingos, así como en una serie de teleteatros.
También destacó en una veintena de telenovelas, entre ellas Cadenas de amor, Cuidado con el ángel, Juicio de almas, Los caudillos, La gata, Mañana será primavera, Eclipse, Días sin luna, Valentina, Obsesión y Lágrimas amargas.
Así como Manantial del milagro, Divorciadas, Agujetas de color de rosa, Marisol, La otra, y la más reciente Amarte es mi pecado, cuyos últimos capítulos los grabó en 2004.
En la penúltima semana de diciembre del año pasado, Ofelia Guilmain fue internada en un conocido hospital capitalino, en donde recibió tratamiento para la afección bronquial que padecía de manera intermitente desde hacía varios años.
A principios de este 2005 la actriz ya se encontraba en su casa, en donde convalecía y se decía que iba en franca mejoría; sin embargo, la madrugada de este viernes falleció.
Le sobreviven, sus cuatro hijos, los actores Juan Ferrara, de quien mereció el mote de ''la suegra de México", y Lucía Guilmain, así como Margarita y Esther, quienes no se dedican a la actuación.
Unos de sus nietos son Mauricio y Juan Carlos Bonet, hijos de Juan Ferrara y Alicia Bonet.
En fechas recientes se había anunciado la posibilidad de realizarle un homenaje a la actriz nacionalizada mexicana, para celebrar su trayectoria artística, que la convirtió en una maestra de varias generaciones de histriones y una leyenda de la actuación.
El actor Juan Ferrara relató que para este año se estaba preparando un homenaje en el Palacio de Bellas Artes en honor a su madre por sus 70 años de carrera en las tablas, la cinematografía y la pantalla chica.
A las exequias de Ofelia Guilmain, realizadas en la funeraria Gayoso de Félix Cuevas, asistieron amigos y actores del medio artístico para dar el pésame: Ignacio López Tarso, Benjamín Cann, José Solé, Julissa, Aarón Hernán, Macariá, Pedro Armendáriz y Otto Sirgo, entre otros. Por parte del gobierno federal llegó la titular del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Sari Bermúdez.
De la redacción
