Baden-Baden, 3 de abril. Los líderes de los 28 países miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) iniciaron hoy la cumbre de su 60 aniversario con una cena, en la que surgieron grietas ante la falta de consenso en temas decisivos como la forma de afrontar las relaciones con Rusia y la imposibilidad de nombrar al nuevo secretario general.

No hubo acuerdo esta noche entre los jefes de Estado y de gobierno a la salida de la cena de trabajo en cuanto a la Secretaría General en la ciudad alemana de Baden-Baden, dijo a la prensa una fuente de la alianza atlántica.

Las conversaciones sobre el tema se retomarán este sábado durante la sesión plenaria que se trasladará a Estrasburgo, la otra ciudad sede en Francia, en un encuentro que se celebra en medio de impresionantes medidas de seguridad ante cientos de manifestantes que protestan contra la coalición militar y donde esta noche hubo 300 detenidos y tres lesionados durante escaramuzas.

A pesar de los esfuerzos del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, y de los dos anfitriones de la cumbre del pacto, la canciller alemana Angela Merkel y el presidente francés Nicolas Sarkozy, en la cena con que se abrió la reunión no se logró consenso para designar al primer ministro danés, Anders Fogh Rasmussen, al frente de la organización.

Rasmussen se perfila como favorito para suceder al holandés Jaap de Hoop Scheffer a partir del 31 de julio al contar con el apoyo de Alemania, Gran Bretaña y Estados Unidos, entre los más influyentes, pero según fuentes diplomáticas, Turquía mantuvo su no a Rasmussen ya que el presidente Abdullah Gül persistió en su resistencia, declarada hace días, por no considerarlo apropiado.

La oposición turca se debe, sobre todo, a la actuación de Rasmussen cuando se publicaron caricaturas de Mahoma en diarios daneses y de otros países de Europa y porque Dinamarca permite una estación de televisión de la minoría kurda en su país, lo que es rechazado por Ankara.

Incluso desde Estambul el primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, demandó a la OTAN una alternativa al danés al cuestionar que solamente haya un nombre en la discusión.

Otro de los puntos de fricción más visibles en la primera jornada de la cumbre es el de Afganistán, tema delicado en torno al cual Estados Unidos ha venido pugnando por un mayor compromiso de sus aliados en la intervención que comanda junto con la OTAN en el país asiático. En tanto, los aliados se han mostrado reacios a seguir los pasos de Washington de enviar nuevos contingentes militares.

El saliente secretario general De Hoop Scheffer puso de manifiesto otro de los puntos donde la alianza no es unánime: el modo de llevar la relación con Rusia. Algunos países integrantes, sobre todo los de Europa del este, ven como una amenaza las renovadas aspiraciones de potencia mundial de Moscú, según los informes.

En ese contexto, los jefes de Estado y de gobierno reunidos analizaron las difíciles relaciones con Rusia, considerando la crisis de agosto pasado a raíz de la breve guerra ruso-georgiana, pero también con miras a mejorar la cooperación con Moscú en cuestiones como Afganistán y la lucha internacional contra el terrorismo.

La canciller Merkel anticipó que de la cumbre saldría una señal de acercamiento a Rusia, tras el enfriamiento de relaciones por la guerra entre rusos y georgianos. El Consejo OTAN-Rusia es una instancia muy importante y es necesario fortalecerlo, sostuvo.

Al respecto, existe un deseo de cooperación con Rusia, confirmó esta noche el portavoz de la alianza, James Appathurai.

De cara a la situación con Irán, Merkel acotó que se debe evitar que el régimen de Teherán desarrolle un arsenal nuclear y que con Estados Unidos, ahora, se podrá iniciar un nuevo proceso.

No viene a Europa con planes terminados, sino a escuchar a los europeos y a desarrollar en forma conjunta la visión del futuro. Pero lo que es cierto es que si la OTAN es responsable de todo, no lo será de nada. Debemos prepararla para los desafíos del siglo XXI, dijo el presidente Obama poco antes de que comenzara la cumbre.

El portavoz de la OTAN, James Appathurai, informó que los jefes de Estado y gobierno habían decidido esta noche encargar la elaboración de un nuevo concepto estratégico para la alianza militar, que remplace al actualmente vigente, adoptado en 1999.

Se trata de una actualización de la estrategia actual, ya que algunas intervenciones de la OTAN, como la intercepción de piratas marítimos o la defensa ante ciberataques, no estaban previstas en el documento anterior, señaló.

Pero de ninguna manera se alterará el principio fundamental de la alianza del compromiso de salir en defensa de cualquiera de sus miembros que fuese atacado.

En tanto, Estados Unidos pidió redefinir, reformar la orientación de la OTAN para hacerla más rápida y móvil, y que también intervenga de forma preventiva para evitar futuros conflictos.

En las protestas de repudio a la OTAN, la policía francesa arrestó esta noche a unas 300 personas tras haber dispersado a cientos de manifestantes con gases lacrimógenos y chorros de agua, y acordonó el centro de Estrasburgo, donde los líderes del pacto se reunirán en el segundo día de la cumbre.

La ciudad también fue despejada de las banderas pacifistas que habían colocado los manifestantes.

Unos 25 mil policías alemanes y franceses han sido desplegados para la seguridad de la conferencia cumbre atlántica en las ciudades alemanas de Baden-Baden y Kehl, y la francesa Estrasburgo.

En los incidentes de la mañana, al menos dos agentes franceses resultaron lesionados leves, así como un fotógrafo alemán que fue herido por bala de caucho.

Para este sábado está prevista una gran manifestación en Estrasburgo, sede del Europarlamento y el Consejo de Europa, en la que se esperan hasta 40 mil personas.