Quito, 18 de diciembre. El gobierno de Ecuador dijo este viernes que utilizará la fuerza pública para controlar el uso de energía eléctrica en empresas y comercios en todo el territorio y así evitar un colapso de su sistema, en medio de los esfuerzos oficiales para importar electricidad.

El presidente Rafael Correa declaró una emergencia eléctrica el mes pasado en el país, debido a una dura sequía que provocó una crisis en sus centrales hidroeléctricas y tuvo que recurrir a racionamientos de hasta ocho horas diarias.

En las últimas horas, el racionado abastecimiento de energía se vio amenazado por la reducción en los caudales de la mayor central hidroeléctrica del país, que alcanzaron sus niveles mínimos, y a la demora en la puesta en marcha de centrales térmicas.

La primera sanción directa, si es que se quiere, será que los técnicos de las empresas en conjunto con la policía procederán a quitar el servicio de la energía a esas empresas que estén haciendo el mal uso de la energía, dijo a periodistas el ministro encargado de Electricidad, Miguel Calahorrano.

Los operativos buscan suspender automáticamente la energía en empresas y locales comerciales que utilicen electricidad del sistema nacional, cuando Correa dispuso que deben atender su demanda con generadores propios.

El gobierno espera cubrir unos 4 mil megavatios por hora (mgw) al día de demanda de energía. Ecuador, deficitario en la generación hidroeléctrica, inició el 5 de noviembre un plan de racionamiento ante lo que se considera la peor sequía de las últimas cuatro décadas.

Racionamiento provoca malestar

Los racionamientos de electricidad han provocado malestar entre los ecuatorianos, quienes desde hace una década no soportaban los temidos apagones y está sumando pérdidas en el sector comercial y productivo.

El gobierno ha recurrido a la energía térmica para abastecer la demanda del país, pero los esfuerzos no han sido suficientes para suspender los cortes de energía antes de las fiestas de Navidad como ofreció el mandatario.

En las últimas horas, Ecuador alcanzó un acuerdo con Colombia para importar hasta el lunes unos 500 mwh y desde el martes aumentaría la oferta entre 750 y mil mwh durante 30 días, según un comunicado del Ministerio de Electricidad.

Colombia era uno de los principales vendedores de energía de Quito con unos 9 mil mwh, pero la ausencia de lluvias hizo que el país vecino suspenda la venta de energía, complicando la crisis ecuatoriana. Antes de la crisis Colombia ofertaba a Ecuador entre 8 mil y 9 mil megavatios/hora por día. Perú también abastece de energía a Quito.