Turín, 20 de diciembre. El colero Catania profundizó el bache por el que atraviesa Juventus, tras vencerlo 2-1 en su propio estadio. El resultado se añade a la eliminación de la Liga de Campeones a manos del Bayern Munich y la derrota del pasado fin de semana, 3-1 ante Bari, recién ascendido a primera.

Algunos seguidores de la Juve lanzaron huevos y petardos contra el autobús del equipo a la entrada del estadio de Turín, y durante el juego entonaron cantos racistas, lo que podría costar otra suspensión de un juego al inmueble, como en la temporada anterior.

No hay italianos negros, cantaron los hinchas, como lo hicieron contra el delantero del Inter, Mario Balotelli, de ascendencia ghanesa. Además, los aficionados dieron la espalda a la cancha durante el partido y criticaron a la directiva con otros cantos.

La derrota ubica tercero a Juventus, con 31 puntos, uno detrás del AC Milán, cuyo duelo fue cancelado por el mal tiempo, al igual que otros tres cotejos, y a nueve del líder, Inter de Milán, que derrotó 1-0 a Lazio.