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Se pretende hablar sin tapujos de cómo vencer la enfermedad, comenta el productor

Lanza Holanda serie de tv para ayudar a los niños con cáncer

Inédita en Europa, pues los programas que se producen están orientados a los adultos, utiliza un lenguaje más distendido, más cercano a la mentalidad infantil, asegura

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A finales de marzo pasado se realizó en La Habana, Cuba, la edición 12 del Maratón de la Esperanza Terry Fox, en honor al joven canadiense, quien a los 18 años fue diagnosticado con cáncer y se le amputó parcialmente su pierna derecha, hecho que no fue impedimento para que cada día hiciera una carrera para cruzar su país. Fox murió a los 22 años. En la imagen, unos niños observan la competencia frente al Capitolio CubanoFoto Reuters
 
Periódico La Jornada
Jueves 15 de abril de 2010, p. 9

Amsterdam, 14 de abril. Vencer el cáncer es posible. Ése es el mensaje que la televisión pública holandesa quiere transmitir a los niños del país que padecen la enfermedad, mediante el programa Het Klokhuis over kanker (Lo que hay que saber sobre el cáncer), que se estrenó este miércoles y que pretende hablar claro, sin tapujos, sobre cómo vencer a esa dolencia.

Se trata de una experiencia de televisión educativa infantil inédita en Europa, donde –normalmente– se realizan series o reportajes sobre el cáncer pero, por lo general, casi siempre orientadas a un público adulto.

Esta vez, los guionistas de la serie han pretendido quitar dramatismo a la enfermedad y utilizar un lenguaje distendido, más cercano a la mentalidad infantil, aseguró el responsable de la producción, Loes Wormester, en declaraciones a la radio holandesa.

Según él, desde el primer momento asumimos que se trata de un tema especialmente sensible, pero es mejor tomar el toro por los cuernos y hablar abiertamente del asunto, sobre todo con los niños. Hay que decirles, desde su más tierna edad, que la vida se compone de momentos de alegría y de tristeza.

Cada vez son más los afectados

Lamentablemente, los niños se tienen que familiarizar cada vez más pronto con el cáncer, debido a que los casos de pacientes jóvenes afectados por la enfermedad son cada vez más frecuentes, explicó Wormester.

“Por eso, para muchos niños ya no es un tema tabú, como para ciertos adultos, que pretenden ocultarlo. Nosotros, desde la televisión pública, creemos que no es bueno ocultar la realidad.

Justo de ahí nació la idea de la serie, fundamentalmente didáctica, narrada en un lenguaje lo menos dramático posible, según Wormester.

La serie de la televisión pública holandesa NOS (Nederlandse Omroep Stichting, literalmente Fundación Holandesa de Transmisiones), narra casos como el de Samanta Andriesen, de 19 años, de la localidad de Soest, en el centro del país, a quien se le diagnosticó cáncer cuando tenía sólo 14 años.

El oncólogo me dijo entonces: tienes un bulto muy feo en la pierna que no debería estar ahí. Creo recordar que me habló muy claro. Me dijo que seguramente era un tumor canceroso. De lo que sí me acuerdo, porque nunca lo olvidaré, es que me soltó una frase directa: si no te lo quitamos te vas a morir, contó Andriesen.

Al plantear la radio holandesa la pregunta de si tuvo problemas a la hora de ponerse ante las cámaras, Samanta no lo dudó un instante y contestó: “No tengo problema en contar a los demás cosas de mi enfermedad, es más, me alivia mucho hablar. Espero que cuando otros niños enfermos como yo me vean en la tele, eso les alivie también y sepan que se puede vencer al cáncer. Yo estoy en medio de esa lucha”.

También se narran, entre otros, los casos del pequeño Sjors, de 11 años; Nadime, de nueve, o Khalid, de 10 años. Y es que, según datos oficiales, en Holanda cada año enferman de cáncer alrededor de 400 niños.

Para quienes han producido la serie, no resultó sencillo decidir cómo enfocar el rodaje, pues aunque se trata de un tema muy serio, el tratamiento debía ser menos rígido y formal.

Evidentemente, no puedes meter las cámaras de manera tan directa, brusca y fría, con imágenes de hospitales, agujas, tubos... Cuando piensas que te diriges a un público infantil, tienes que transmitir un mensaje más suave, explicó Wormester, cuya madre enfermó de cáncer cuando él tenía 14 años. “Ese fue uno de los motivos que me impulsaron a llevar adelante este proyecto televisivo: la necesidad de hablar claramente sobre el cáncer. Recuerdo que cuando era niño ni siquiera se podía nombrar la enfermedad. En mi casa se decía de que mi madre padecía de c. Mucho después me enteré de que era cáncer de mama y que le tuvieron que extirpar un seno”.