Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA) registró en 2009 un subejercicio de inversión física de 25 por ciento, equivalente a poco más de 138 millones de pesos, y responsabilizó de ello al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) por el retraso en la entrega de programas.

En su informe anual, hecho público con varios meses de retraso, el organismo paraestatal que administra 19 aeropuertos del país (los menos rentables) señala que el no ejercicio de 138 millones de pesos en gasto de capital fue resultado de no contar con los tiempos mínimos necesarios para concluir los procesos de licitación y entrega de los bienes, en proyectos relacionados con equipamiento y obras de combustibles (76 millones), en el programa de modernización aeroportuaria (20 millones), y en el programa de mantenimiento de infraestructura aeroportuaria (25 millones de pesos), entre otros.

Lo anterior, debido a que el AICM no informó hasta septiembre de 2009 su nueva expectativa de pago al organismo por servicios corporativos, incrementando su estimado en 430 millones de pesos, señala en su informe anual.

ASA obtuvo una utilidad de operación de 652 millones de pesos, principalmente por la caída de 765 millones de pesos en gastos de operación, así como el incremento de 307 millones en ingresos corporativos y de consultoría.