Roma, 30 de mayo. La coalición de centroderecha del primer ministro italiano Silvio Berlusconi sufrió hoy un fuerte revés electoral en su bastión político de Milán y en Nápoles, la tercera ciudad en importancia del país, lo que podría marcar el fin del berlusconismo y precipitar la convocatoria a elecciones generales, hasta ahora previstas para 2013.

Berlusconi reconoció su derrota, pero expresó confianza en el futuro de la coalición formada por el partido Casa de las Libertades y la Liga Norte, de cara a las elecciones generales de 2013. Soy un combatiente y cada vez que pierdo triplico la fuerza, dijo.

Con casi todos los votos escrutados, el candidato de la izquierda Giuliano Pisapia –abogado penalista de 62 años– parece ser el próximo alcalde de Milán después de 18 años de gobiernos derechistas, con cerca de 55 por ciento de los votos, frente a 46 por ciento de la alcaldesa Letizia Moratti, quien hizo campaña diciendo que su contendiente convertiría la ciudad en un campo de gitanos.

Tengo la sensación de que Milán fue liberada, dijo Pisapia después de que las autoridades confirmaron su victoria.

Inmerso en cuatro juicios por corrupción y prostitución de menores, el gobernante de 74 años perderá el control de la capital financiera de Italia, sede de su vasto imperio mediático, además del puerto de Nápoles, que también quedó en manos de un político de centroizquierda, militante del partido Italia de los Valores.

El primer ministro sumó hoy un nuevo proceso judicial al ser declarado bajo investigación por la fiscalía de Roma, acusado de haber ocupado la televisora pública RAI para difundir propaganda electoral, el 20 de mayo pasado.

Alarma en la Liga Norte

La pérdida de ciudades como Novara o Pavia avivó la alarma entre miembros de la Liga Norte en torno a la relación del partido con el primer ministro.

Sin embargo, el ministro del Interior, Roberto Maroni, militante de la Liga Norte, dijo que el resultado no amenazaba la supervivencia de la coalición, aunque admitió que es una cachetada y una señal de que el gobierno necesita mejorar.

Es la primera derrota de la coalición de centroderecha de Berlusconi desde que volvieron al poder, y transmite una señal clara de la desilusión de los votantes, señaló Maurizio Pessato, de la encuestadora SWG.

Estos resultados hacen más probables las elecciones anticipadas, posiblemente el año que viene, y no veo ninguna posibilidad de reformas económicas significativas aplicadas por un gobierno en su última etapa, añadió.

El gobierno se prepara para presentar un plan para reducir el déficit presupuestario en unos 57 mil millones de dólares, después de que la agencia de calificación Standard and Poor’s recortó la perspectiva de Italia de estable a negativa; hay mucho en juego.

Italia tiene una de las economías más estancadas de Europa, más de la cuarta parte de sus jóvenes están desempleados y la política del gobierno se ve limitada por la necesidad de contener una montaña de deudas equivalente a 120 por ciento de su PIB.