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En la frontera la situación no mejora: obispo de Nuevo Laredo

Ante la violencia, en la Iglesia más que desearle suerte a Calderón, oramos por él
 
Periódico La Jornada
Martes 31 de mayo de 2011, p. 10

La escalada de violencia generada por el crimen organizado continúa, particularmente en las áreas fronterizas, lamentó el obispo de Nuevo Laredo, Tamaulipas, Gustavo Rodríguez Vega, quien indicó que en su diócesis, debido a que prevalece una desinformación oficial, son los ciudadanos quienes corren la voz sobre los actos delictivos.

“Que hubo una balacera aquí y otra allá, un levantado aquí... todos tenemos conocimiento de que algo ha pasado”, expresó el también presidente de la Comisión Episcopal de Pastoral Social de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM), quien remarcó que al menos en Nuevo Laredo no se ha notado ningún cambio para mejorar en este ámbito, y el clima está tenso.

Entrevistado al concluir la recepción que ofreció el nuncio apostólico en México, Christophe Pierre, con motivo de la celebración del sexto aniversario del pontificado de Benedicto XVI y en el contexto del comienzo de la 91 asamblea plenaria de la CEM, Rodríguez Vega llamó a la población a ser prudentes, pero no dejar de hacer lo que se debe por temor a la violencia.

Después de cada episodio (de violencia), no podemos replegarnos; la vida tiene que continuar, aunque sí hay que ser prudentes.

Sobre el tema, Emilio Berlié, arzobispo de Yucatán, abordado también al salir de la nunciatura, señaló que ante la inseguridad, la Iglesia y sus ministros hacemos oración por la paz. Reconoció que actualmente la situación es compleja en esta materia; por eso también, más que desear buena suerte en su gestión al presidente Felipe Calderón, oramos por él.

Justamente ayer, también en la reunión, Pierre hizo un brindis no sólo por el papa Benedicto XVI, sino también por Calderón, y sobre ello, al preguntársele a Berlié si este gesto era en reconocimiento a su labor al frente del gobierno, el prelado aclaró que es más bien en respeto al mandatario y porque el Vaticano mantiene relaciones diplomáticas con México.

A la reunión no sólo acudieron jerarcas católicos, como el cardenal Norberto Rivera Carrera y el obispo Onésimo Cepeda –quien dijo estar recuperado de su padecimiento cardiaco y ante una pregunta expresó que espera que en el estado de México gane la gubernatura el bueno–, sino también el titular de la Secretaría de Salud, José Angel Córdova Villalobos; el secretario de Educación Pública, Alonso Lujambio, y el gobernador de Morelos, Marco Antonio Adame. Además hicieron acto de presencia empresarios como Gerardo Gutiérrez Candiani, líder de la Confederación Patronal de la República Mexicana.

También departieron en la reunión Rodolfo Mayagoitia, representante territorial en México de los legionarios de Cristo, y Paulo Tort, titular de la Dirección General de Asociaciones Religiosas, de la Secretaría de Gobernación.

En cuanto al tema de la violencia, el obispo auxiliar de Puebla, Eugenio Lira Rugarcía, dijo que en dicha arquidiócesis, hasta ahora, gracias a Dios las cosas están bien en ese rubro y queremos que sigan así. Mientras el arzobispo de Morelia, Alberto Suárez Inda, aseguró que por su arquidiócesis la situación está tranquila.