Damasco, 14 de noviembre. El ministro sirio de Relaciones Exteriores, Walid Muallem, declaró hoy que la Liga Árabe dio un paso peligroso al suspender a Siria como miembro del bloque y señaló que el regimen de Bashar Assad no se doblegará.

A su vez, el rey de Jordania, Abdalá II, pidió la renuncia de Assad, lo que lo convierte en el primer dirigente árabe en pedir su dimisión.

Siria pagará el precio de sus posturas firmes, pero no se doblegará y saldrá fortalecida, pues los complots contra el país fracasarán, advirtió Muallem en conferencia de prensa.

El ministro excluyó la eventualidad de una intervención en el país. Siria no es Libia; tal escenario no se repetirá, el pueblo sirio no debe preocuparse, y expresó además su confianza en que Rusia y China frenarán los esfuerzos de Occidente para que la Organización de Naciones Unidas condene a Damasco.

La Unión Europea (UE) decidió este lunes congelar préstamos a Siria y extender a 18 personas –principalmente militares– las sanciones por la represión a manifestantes, tras una reunión de los 27 ministros de Relaciones Exteriores del bloque en Bruselas.

La ola de violencia se recrudece con ataques de partidarios del régimen contra la embajada de Arabia Saudita en Damasco y varias legaciones de Francia y Turquía.

Estados Unidos se congratuló por la consolidación del consenso contra Assad y el régimen sirio, tras las decisiones tomadas por la Liga Árabe y la UE.

Por lo pronto, al menos 40 sirios murieron en enfrentamientos entre leales a Assad y opositores al régimen en una localidad cerca de la frontera con Jordania, informaron activistas.