Resabios de esclavismo y colonización persisten en la realidad diaria de las trabajadoras del hogar en México. Machismo, misoginia, racismo y clasismo, entre otras formas de discriminación, así como abusos laborales legalizados y sin regulación, son parte de lo que se vive en cientos de miles de hogares, en muchos de los cuales también conviven el buen trato y el afecto, con los que se sustituyen los derechos, incluso sin darnos cuenta, refiere Ricardo Bucio Mújica, presidente del Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación, durante la presentación del libro Dos mundos bajo el mismo techo. Trabajo del hogar y no discriminación”, editado por el organismo.

Según indican diversas encuestas, 95 por ciento de las empleadas del hogar no tiene acceso a servicios de salud y hasta 65 por ciento de empleadores no está de acuerdo en que las trabajadores laven su ropa junto con la de ellos, según indican diversas encuestas.

El libro reúne 16 artículos de académicos, activistas, funcionarios y legisladores que reflexionan en torno a los asuntos pendientes en materia de derechos de este sector.

Entre los participantes destaca Marcelina Bautista, creadora del Centro de Apoyo y Capacitación para Empleadas del Hogar y una de las principales defensoras de ese sector, quien hace un recuento de su vida laboral y su lucha por el reconocimiento de ese trabajo.

Nuestros derechos, sujetos al criterio de buena voluntad

Nuestro trabajo está desvalorizado y nuestros derechos están sujetos al criterio de la buena voluntad de quienes nos contratan; en el ámbito social, vivimos el menosprecio y la discriminación; en el institucional, padecemos la ausencia de políticas públicas y mecanismos que posibiliten el ejercicio de nuestros derechos, y en el familiar, nuestro trabajo se ve como una actividad propia de mujeres, expone.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Uso del Tiempo 2009, cuando hay presencia de trabajadoras domésticas en los hogares la tasa de participación en el mercado laboral de las mujeres se incrementa de 36.4 a 50.3 por ciento.

Durante la presentación del libro, realizada ayer en Casa Lamm, Bucio Mújica subrayó que el trabajo del hogar es uno de los temas sociales que más rechazo enfrenta, hasta ahora no es un tema de agenda, pese a que 2.1 millones de personas se dedican a esta actividad.

En tanto, la titular del Instituto Nacional de las Mujeres, Rocío García Gaytán, señaló que las mujeres que se dedican al trabajo del hogar enfrentan una discriminación múltiple por ser mujeres, indígenas y pobres, además de que su trabajo no es reconocido por la legislación laborales del país.

Rocío García Gaytán comentó que la publicación es novedosa, ya que no existe mucho material al respecto que permita visualizar la situación que enfrentan las trabajadoras del hogar.