Opinión
Ver día anteriorMartes 12 de noviembre de 2013Ver día siguienteEdiciones anteriores
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México SA

Bronce en bajos salarios

México, premio a lo peor

Tijeretazos a la educación

M

éxico se mantiene entre las naciones más destacadas del planeta y, por lo mismo, no deja de acumular galardones, aunque ambos conceptos, como ya es costumbre, son medidos en sentido contrario, de abajo hacia arriba, es decir, el país sobresale por los pésimos resultados económicos que reporta, y obtiene premios por lo mal que hace las cosas y lo peor que atiende a su población.

En este contexto, la Cepal y la Organización Internacional del Trabajo (OIT) acaban de informar que México merecidamente obtuvo la medalla de bronce en materia salarial, por ocupar el tercer peor nivel entre nueve naciones de América Latina consideradas en el análisis por las citadas instituciones. Entonces, una presea más para exhibir en la vitrina de logros del sistema, pues la información revela que México y Costa Rica son los únicos de entre nueve naciones de las que se cuenta con información estadística que registraron una tendencia a la baja (permanente) en los salarios reales del sector formal entre 2011 y el primer semestre de 2013 (La Jornada, Susana González).

Tal información indica que en 2011 los salarios en México tuvieron un aumento de un punto porcentual respecto al año previo (la mitad del promedio regional), en 2012 todavía crecieron casi 0.5 por ciento, pero en los primeros seis meses de 2013 el aumento fue menor a medio punto porcentual. En el otro extremo, en Chile y Colombia no han dejado de subir los salarios, ya que pasaron de 2.5 a 4.5 por ciento, y de 0.3 a 3 por ciento, respectivamente, en el lapso citado. En las otras cinco naciones (Brasil, Costa Rica, Panamá, Uruguay y Venezuela) los salarios crecieron en 2011 y 2012 pero cayeron en el primer semestre de 2013.

Ambos organismos sostienen que si bien en general, los salarios de la región siguen creciendo pero a tasas menores, con una expansión similar al promedio del año pasado, el poder adquisitivo de los trabajadores ha resultado afectado por la aceleración de la inflación y la menor generación de empleos entre enero y junio (el 30 de octubre el empleo asalariado apenas aumentó 1.6 contra 3.1 por ciento del primer semestre de 2012). Frente a un contexto económico externo poco favorable, que los países latinoamericanos sostengan la demanda interna apoyados en el mercado laboral contribuye a mantener su crecimiento económico.

Nada grato el análisis de la Cepal y la OIT, que les dio pie para otorgar la citada presea, pero resulta peor el panorama que documenta la Cámara de Diputados, pues con información propia, del Instituto Mexicano del Seguro Social y del Inegi, advierte que desde diciembre de 2006, cuando menos, el salario base de cotización al IMSS reporta un sensible desplome, a tal grado que en septiembre de 2013 tal ingreso resulta sustancialmente menor, en términos reales, que el registrado en el último mes de hace siete años, es decir, que lejos de reportar aumentos raquíticos –como señalan la Cepal y la OIT– dicho ingreso está por debajo del obtenido al cierre del sexenio foxista, cuando ya era considerado reducido.

Con la crisis de 2008-2009 el salario base de cotización al IMSS se desplomó, y para recuperar el de por sí raquítico nivel nominal que registró en octubre de 2008 tuvieron que pasar 27 meses, pero nunca retomó el que reportó en diciembre de 2006, de tal suerte que la medalla de bronce bien podría convertirse en plata, e incluso en oro a nivel latinoamericano, porque el deterioro sigue su curso.

Al respecto, la Cámara de Diputados señala que de acuerdo con el IMSS, en septiembre pasado el salario base de cotización promedio se ubicó en 8 mil 74 pesos al mes (nominales), para un crecimiento anual de 3.67 por ciento o 285 pesos, mayor en 0.09 puntos porcentuales con relación al crecimiento del mes anterior que alcanzó un incremento de 3.57 por ciento. Sin embargo, en el mismo periodo la inflación fue de 3.39 por ciento por lo que, en términos reales, el salario creció 0.27 por ciento.

Por sectores de actividad económica, los de la construcción y de agricultura, ganadería, silvicultura, caza y pesca tuvieron las mayores reducciones anuales: 1.82 y 0.54 por ciento en términos reales, respectivamente. En cambio, los sectores con mayores incrementos anuales para septiembre y en todo lo que va del año, fueron las industrias extractivas y la industria eléctrica y suministro de agua potable, con 1.73 y 2.22 por ciento real, en ese orden.

Ahora bien, la mejora observada del salario base de cotización en los últimos tres meses, en términos reales, no es resultado de aumentos en el ingreso, sino producto de una inflación menos alta. En lo que va del año se registró una inflación anual promedio de 3.86 por ciento y un crecimiento anual promedio del salario nominal de 3.97 por ciento. En tanto, en el último trimestre, aunque el salario nominal alcanzó un menor crecimiento anual en relación al primer semestre del año, promediando en el trimestre 3.58 por ciento, el crecimiento en el trimestre del índice nacional de precios al consumidor presentó un incremento anual promedio de 3.44 por ciento. Lo anterior causa un repunte de los salarios reales en estos meses, reportando un ligero crecimiento anual promedio de 0.13 por ciento en el trimestre.

Aun así, los salarios del sector formal siguen sin recuperar su nivel previo a la crisis. Comparado, en términos reales, con la cifra más elevada, en enero de 2008 el salario básico acumula una pérdida de 2.96 por ciento. Esto se traduce, a precios de diciembre de 2010, en una reducción salarial real equivalente a 225.55 pesos. En suma, los salarios nominales siguen deprimidos (y mucho más los reales). En los últimos 12 meses el crecimiento real anual del salario base de cotización al IMSS promedió sólo 0.11 por ciento, por lo que las alzas en los salarios nominales han sido casi iguales a la inflación, en el mejor de los casos, es decir, aumento real de cero por ciento.

Las rebanadas del pastel

Los rectores de las universidades públicas del país advierten sobre la pretensión gubernamental (muy al estilo foxista) de aplicarles recortes presupuestales cercanos a 2 mil 200 millones de pesos para 2014, con lo que se afectará su cobertura y calidad. Tienen toda la razón y de los diputados dependerá si se permite el atropello, pero si se revisa íntegramente la propuesta del Ejecutivo en materia educativa los tijeretazos están a la orden del día, de tal suerte que no sólo sufrirán las instituciones de educación superior, sino el aparato completo.

Twitter: @cafevega