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El mecanismo “sólo pretende crear una zona de seguridad para Estados Unidos”

México, simple comparsa en el Acuerdo de Asociación Transpacífico: especialista
 
Periódico La Jornada
Sábado 8 de febrero de 2014, p. 8

Aunque en teoría es un pacto de libre comercio, el Acuerdo de Asociación Transpacífico (TPP, por sus siglas en inglés) impulsado por Estados Unidos no busca ningún propósito económico, sino más bien reposicionar a Washington en Asia, para contener la influencia y el poderío de China.

Así lo estimó Alicia Puyana Mutis, profesora e investigadora de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso), quien advirtió que en dicha estrategia países como México sólo pueden jugar el rol de comparsas, sin obtener ningún beneficio real para sí mismos.

Al participar en el seminario El TPP: ¿bisagra o confrontación entre el Atlántico y el Pacífico? Las posibles repercusiones para México, la economista señaló que dicho acuerdo sólo pretende crear una zona de seguridad para Estados Unidos y Europa frente a las potencias orientales.

Los intereses reales (de Washington) no son económicos, sino geopolíticos. El crecimiento del producto interno bruto estadunidense sería sólo de 0.013 por ciento anual, que es casi nada, o de 2.4 por ciento asumiendo que haya pleno empleo, y sólo beneficiaría a algunos sectores, pero de forma muy inequitativa, explicó Puyana.

De esta forma, el TPP únicamente buscaría consolidar los intereses de Estados Unidos y la Unión Europea en la región Asia-Pacífico y crear allí una réplica de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, para disciplinar a China y generar un espacio de seguridad con los apoyos de Japón y Corea del Sur.

Para lograr este objetivo, añadió, Washington involucra a países de desarrollo medio o bajo –como México– en tratados de libre comercio, mediante los cuales impone su agenda en ciertos aspectos que no ha logrado establecer en entidades como la Organización Mundial de Comercio, a la cuales ha vuelto obsoletas y medievales.

Los países en desarrollo, recalcó, ganan poco con los tratados de libre comercio que firman con los industrializados, pues generalmente dejan de invertir en sus sectores científico y tecnológico y desestimulan sus sectores productivos, para concentrarse de manera casi exclusiva en exportar materias primas o manufacturas simples.