Política
Ver día anteriorMiércoles 11 de noviembre de 2015Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Gobierno y PRI demandan a los gobernadores no cabildear en San Lázaro

Pactan Hacienda y diputados no hacer reasignaciones del gasto público de 2016

Se agravan las presiones porque hay $221 mil millones menos para distribuir: Ramírez Marín

Foto
Sesión de ayer en San Lázaro, donde se dio lectura a iniciativas de los diputados en diversas materiasFoto José Antonio López
 
Periódico La Jornada
Miércoles 11 de noviembre de 2015, p. 12

La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) acordó con los grupos parlamentarios de la Cámara de Diputados no aplicar ningún cambio para reasignaciones del gasto público 2016, y pactó con los gobernadores que los recursos para las 32 entidades sean los definidos en el proyecto de gasto que se someterá al pleno a partir del jueves próximo.

Aunque desde el gobierno federal y el PRI se advirtió a los gobernadores que no se presenten a ejercer cabildeo en la Cámara, y tras un acuerdo entres las fracciones parlamentarias por el cual se ratificó tal determinación, con el propósito de no descuadrar el presupuesto, algunos de éstos enviaron a sus cabilderos para insistir en modificaciones al paquete.

Ayer, el Palacio Legislativo de San Lázaro fue escenario de múltiples reuniones entre presidentes municipales y representantes de los gobiernos de los estados con diputados federales. Cientos de cabilderos se dieron cita en la Cámara para tratar de convencer a sus interlocutores sobre las necesidades de sus comunidades y estados, así como de la urgencia de invertir en ellos.

También, desde el sector de gobernadores y de la SHCP se trató de inhibir las intenciones de los diputados de sus estados de impulsar proyectos de inversión cuantiosos; a cambio se ofreció una bolsa promedio de 3 millones de pesos por cada legislador, para erogarlos en obras menores.

La víspera de la aprobación del Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2016, se descartó que el dictamen sea objeto de cambios, a pesar de las presiones crecientes provenientes de los diversos sectores gubernamentales que pretenden mayores bolsas de gasto.

El vicecoordinador del grupo parlamentario del PRI, Jorge Carlos Ramírez Marín, confirmó que la SHCP opera, en conjunto con los integrantes de la Comisión de Presupuesto, la negociación del gasto.

“La Secretaría de Hacienda ya está instalada aquí en la Cámara para atender dudas y las solicitudes de los legisladores. Creo que vamos con las premuras que siempre significa un presupuesto, pero ahora agravadas porque hay 221 mil millones menos para distribuir. Sin duda, eso es significativo y tenemos que asumirlo; no se va a poder repartir como en otros años.

Señaló que para su partido los temas indeclinables son salud, educación y, en buena medida, el rubro del campo. Estamos luchando y empujando porque haya más recursos para educación y salud, sobre todo.

Al preguntarle si será posible modificar el contenido del proyecto, replicó: creo que tenemos que ser concretos y sensatos. Con 221 mil millones de pesos menos es difícil empezar cualquier cosa. Tendrá que ser cuando la asignación esté un poco mejor. Hoy vamos por mantener el crecimiento y por hacer que las plantas necesarias de salud y educación no tengan merma alguna y sigan creciendo. Ese es nuestro piso: no permitir que donde hacen falta recursos se disminuyan.

–Se advierte que a más tardar el viernes estará aprobado este paquete presupuestal: ¿la fecha límite es el domingo?

–Ojalá que ese rumor sea cierto. Las comisiones están trabajando bien y la labor que están desempeñando es seria. Contestando su pregunta, considero que las presiones externas son como las que se han dado (en la discusión) en otros presupuestos. Los planteamientos serán escuchados, van a recibir atención, y en la medida de lo posible se incluirán, pero insisto: un presupuesto con 221 mil millones menos no puede esperar grandes saltos ni grandes incrementos en temas.

Es un presupuesto, como explicó el secretario de Hacienda, para mantener el crecimiento, para logar inclusive que aumente, pero con gran austeridad de parte del gobierno. La base cero se puede ver claramente en temas como el de vivienda, que ahora compacta distintos programas en uno sólo, así como en programas que estaban en las secretarías de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano, y en la de Desarrollo Social; ahora van a estar en una sola. La base cero consistía en eso precisamente: en la reorganización de los programas de gobierno, de los programas presupuestales para poder alcanzar mayor eficiencia.