Opinión
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Desde el otro lado

Resultado previsible

F

altan pocas horas para conocer los resultados de la primera etapa de los caucus (reuniones políticas) mediante las que en Iowa se elegirá al candidato de los partidos a la presidencia estadunidense. Por el singular método de selección, es difícil saber quiénes serán los ganadores de esta fase en la que se discuten en asambleas populares las propuestas de los aspirantes. Dada las características de los pobladores del estado, el candidato republicano que ganará será el que tenga un perfil agresivo y conservador. En el flanco demócrata pareciera ser que los más moderados tomarán partido por Hillary Clinton, quien ha insistido en consolidar y, de ser posible, avanzar en las reformas de Obama. Argumenta que el proyecto radical de Bernie Sanders, su oponente demócrata, es difícil de concretar y pondría en peligro esos avances.

De acuerdo con el censo, en 2014 en Iowa 87 por ciento de la población era blanca, 5.6 latina, 3.4 afroestadunidense y menos de 4 de otro origen. Su gobernador, los dos senadores y tres de los cuatro diputados en el Congreso son republicanos. El órgano legislativo estatal también está dominado por ese partido. Dicho perfil poblacional y político da una idea del contenido de las campañas y sus resultados.

Los precandidatos republicanos se han centrado en criticar a la administración de Obama y a la cercanía de Hillary. Pero, tal vez las más acres críticas fueron las que se lanzaron entre ellos. Los más radicalmente conservadores, Donald Trump y Ted Cruz, encabezan las encuestas, lo que no es sorpresa dada las características del estado.

Cabe preguntarse por qué Iowa, con una población que representa menos de 10 por ciento del país y sólo siete votos de 538 en el colegio electoral, tiene tanta relevancia en el proceso electoral. Probablemente es debido a su perfil eminentemente blanco, religioso y conservador, características que aún predominan en buena parte del país. Hay que agregar el temor a que otro gobernante moderado de tendencia liberal llegue a la Casa Blanca. No es descartable que los más conservadores busquen a un candidato que enarbole un conservadurismo más enfático y agresivo, como el de Trump y Cruz.

¿Porque los demócratas han permitido que un estado controlado por los republicanos sea el que determina la dinámica las elecciones? Una de las respuestas es la presión que desde hace muchos años, los demócratas en ese estado, en acuerdo con algunos de los precandidatos, han ejercido sobre el resto del partido para perpetuar esa anomalía, con la evidente complacencia del partido republicano.