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Tom Hayden

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Tom Hayden, fallecido el pasado 23 de octubre a los 76 años, surgió como líder estudiantil y figura central del movimiento contra la guerra en Vietnam en los años 60 y por más de medio siglo fue parte de la expresión de resistencia estadunidense contra el racismo, las políticas bélicas y el intervencionismo. Imagen del 25 de junio de 2007 durante una firma de ejemplares de Ending the war in IraqFoto Afp
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om Hayden, fallecido el 23 de octubre a los 76 años de edad, surgió como líder estudiantil y figura central del movimiento contra la guerra en Vietnam en los años 60 y por más de medio siglo fue parte de la expresión de resistencia estadunidense contra el racismo, las políticas bélicas, el intervencionismo y fue incluso negociador de paz entre bandas en Los Ángeles; también fue solidario con procesos revolucionarios y movimientos de liberación en varias partes del mundo, desde Cuba hasta Centroamérica y el EZLN.

Hayden fue impulsor del gran movimiento estudiantil que surgió a principios de los 60 que en parte nace con el movimiento de derechos civiles y que se vuelve columna vertebral del movimiento contra la guerra de Vietnam. Fue fundador de Students for a Democratic Society (SDS), que estableció las bases teóricas del movimiento de la juventud, y parte de la llamada Nueva Izquierda, con la Declaración de Port Huron en 1962.

En ese famoso documento escribió: Somos personas de esta generación, criadas en una comodidad modesta, ahora viviendo en universidades, observando incómodamente el mundo que heredamos. El documento convoca a estudiantes a sumarse a la oposición a la guerra y al movimiento de derechos civiles y a promover el activismo estudiantil tanto en las calles como en las universidades. Y concluye: si parecemos buscar lo inalcanzable, como se ha dicho, entonces que se conozca que lo hacemos para evitar lo inimaginable.

Desde principios de su activismo Hayden fue visto como un peligro potencial por la FBI. En 1964, cuando se dedicaba a la organización comunitaria en Newark, Nueva Jersey, la agencia ya lo vigilaba por ser un orador efectivo tanto entre intelectuales como entre personas negras. El propio director de la FBI, J. Edgar Hoover, escribió en un memorando: uno de los objetivos primarios debería ser neutralizar (a Hayden) en el movimiento de la Nueva Izquierda, recuerda la abogada progresista Marjorie Cohn, ex presidenta del Gremio Nacional de Abogados.

En 1968, en las afueras de la Convención Nacional Democrata realizada en Chicago, Hayden fue uno de los organizadores de las masivas protestas anti-guerra que fueron atacadas por las fuerzas policiacas, con cientos de heridos y detenidos. Hayden, con siete dirigentes más –incluido Abbie Hoffman, el Pantera Negra Bobby Seale y Renny Davis– fueron arrestados y enjuiciados por conspiración para armar un motín y cinco de ellos fueron condenados a cinco años de cárcel, pero no antes de enjuiciar a las autoridades desde la banca de acusados. Ese fallo fue revertido poco más tarde.

En 1972 fundó la Campaña de Paz en Indochina junto con Jane Fonda (con quien se casó el siguiente año). Hayden viajó a Vietnam del Norte en varias ocasiones a lo largo de esos años, incluso regresó de uno de ellos con prisioneros de guerra estadunidenses que le entregó el gobierno de Vietnam del Norte, que sólo negociaba con estadunidenses en el movimiento antiguerra.

En los próximos años, continuando su trabajo contra la guerra, y más tarde, para proyectos de promoción de justicia económica y el movimiento anti-nuclear como el ambientalista, Hayden también participó en los esfuerzos de solidaridad con Centroamérica, Cuba y Venezuela, y contra la intervención de su gobierno ahí.

Hayden estaba entre los más moderados de los dirigentes del movimiento estudiantil, lo que lo llevó a rupturas con algunos de sus colegas más radicales durante la guerra. En casi toda su actividad nunca se presentó como un revolucionario, sino más bien como un reformista progresista. Fue electo como candidato del Partido Demócrata a la cámara baja del Congreso estatal de California en 1982, y después al Senado estatal en 1992, donde promovió más de 100 proyectos legislativos, sobre todo en de asuntos ambientalistas comunitarios. Uno de sus colegas lo calificó el radical dentro del sistema.

En 2008 fundó la organización Progresistas por Obama, pero insistió en la necesidad de generar movimientos sociales para presionar al gobierno, sobre todo en torno a las guerras en Irak y Afganistán. En esta contienda actual cambió su apoyo de Bernie Sanders a Hillary Clinton, insistiendo en que ella estaba más comprometida con la justicia racial.

Uno de sus libros más recientes Listen Yankee! Why Cuba Matters (2015), es fruto de una colaboración con Ricardo Alarcón de Quesada, quien escribió después de la muerte de su amigo que conoció desde los 60: “nos unieron la lucha, los ideales y sobre todo la terca convicción de que un mundo mejor era posible y que valía la pena dedicar la vida a conquistarlo”.

En 2002 editó una colección de ensayos y artículos sobre el movimiento zapatista de una diversidad de autores –incluyó textos publicados primero en La Jornada– entre ellos José Saramago, Paco Taibo II, Carlos Monsiváis, John Berger, Eduardo Galeano y Elena Poniatowska. En su introducción, Hayden escribió: “La rebelión de Chiapas el 1º de enero de 1994 fue la primera denuncia del ‘nuevo orden mundial’ desde la perspectiva de las víctimas de ese orden”. Subrayó que con eso se detonó un nuevo marco de donde surgieron las rebeliones altermundistas en varios puntos del planeta.

Cuenta que él era legislador estatal cuando estalló la rebelión zapatista, y de inmediato envió una carta el entonces presidente Clinton advirtiendo contra la intervención estadunidense. Poco después visitó Chiapas y regresó para promover diversas actividades de solidaridad.

Entrevistado por La Jornada en diversas ocasiones, en Chiapas, en las calles de Los Ángeles, Chicago o Nueva York durante alguna protesta, o en foros y fiestas por todo el país, Hayden ofrecía una perspectiva repleta de experiencia personal en la frecuentemente oculta historia de las luchas por la paz y la justicia en Estados Unidos.