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Andanzas

Danzcervantino 2009

Foto
Bailarín de Delfos en el Cervantino de 2006Foto María Luisa Severiano
C

omo cada año, en Guanajuato se efectúa el Festival Internacional Cervantino (FIC) con el propósito de reunir a los mejores exponentes de las diversas actividades artísticas y culturales, y el estreno en la dirección del encuentro de la doctora Lidia Camacho, quien ha mostrado su dinamismo y energía desde que estaba en Radio Educación, impulsando proyectos e importantes actividades de rescate y conservación.

Un vistazo a la programación muestra una vez más la escasa presencia de la danza en este encuentro, en comparación con la abundancia de actividades musicales y teatrales de gran calidad.

Sin embargo, la cartelera dancística, unida a la de teatro, despierta gran interés, porque afirma el avanzado camino, que desde los años 90 del siglo XX, estas artes han recorrido en la búsqueda de la importante simbiosis de elementos y conceptos escénicos, visuales y musicales que han creado la avant garde o vanguardia de estas expresiones.

Este movimiento ha crecido con sorprendente ánimo y creatividad, sobre todo en el ámbito teatral, y la danza, imprescindible, se presenta como fuerza motriz del diálogo o monólogo interno de los actores, y lo hace con su expresión más pura y genuina.

De este modo, es definitiva la fusión plural y riquísima del movimiento corporal, educado e interpretado con la variedad de elementos del drama y las artes visuales.

Esto no significa que las obras tradicionales del ballet, por ejemplo, sigan vigentes entre público, porque no han hecho más que perfeccionarse a lo largo de los siglos y mantenerse en su tradición con la mayor fidelidad y por otra parte con la posibilidad de que audaces coreógrafos ofrezcan modernísimas versiones de obras como Giselle o El lago de los cisnes.

También queda de manifiesto que ya no es suficiente el trabajo técnico de escuelas tradicionales ante la capacidad y potencial de las jóvenes generaciones. Cada vez se utilizan mayor cantidad y variedad de técnicas corporales para ampliar un lenguaje que a veces sólo balbucea o que ya sabemos lo que van a expresar, pues corporalmente han dicho lo mismo miles de veces, y ya no es fresco ni genuino.

Así, encuentro la programación de danza del FIC enriquecida soberbiamente con las obras de teatro programadas.

Prometedora propuesta de Quebec

En danza tenemos Le Carre del Lombes o Lá, ou je Vis de Daniele Desnoyers, proveniente de Quebec, Canadá, pero con la suficiente carga de la nueva danza europea sin concesiones, fuerte y vigorosa en su versión atlética del movimiento, lo que nos resulta interesante y prometedor, pues madame Desnoyers viene cargada de triunfos y reconocimientos de diversas partes del mundo.

Corpo, el famoso grupo brasileño, llegará con Ongoto, retando la gravedad y emulando la fuerza primigenia de la vida con sus ritmos, tambores y bailarines de ancestral sensualidad, con la música de Caetano Veloso y Jose Miguel Nisnik, toda una convulsión escénica latinoamericana.

Asimismo, está el grupo mexicano Delfos, de Claudia Lavista y Víctor Manuel Ruiz, con la obra El mensajero sideral en honor a un gran sobreviviente de la Inquisición del siglo XVI: Galileo Galilei, con la creatividad que caracteriza a esta espléndida agrupación.

El Ballet Folclórico de la Universidad de Guanajuato y el Nuevo Ballet Español, dirigido por Rojas y Rodríguez, con la flamante generación de un flamenco en fusión con el siglo XXI, así como el pequeño grupo de la canadiense Ginette Lavrin, o Vértigo, también integran el programa.

No se pierda de la sección de teatro a Le Carrousel Compagnie De Theatre de Ajour Hui, de Suzzanne Lebeau, con la obra El ruido de los huesos que crujen, con una perturbadora visión sobre la niñez. Lebeau es heredera de la corriente del genial Giles Maheau, y su famoso Café de Ciegos, que nos conmocionara hace años en México.

No hay que perderse la compañía Meno Fortas, de Etmuntas Nekrosius y su Hamlet, así como Ex Machina, de Robert Lepage.

Los trabajos mencionados son parte de las actividades del Cervantino que se deben ver, amén de la plana musical, talleres y conferencias, exposiciones y espectáculos callejeros, etcétera.