Tegucigalpa, 27 de enero. Miles de simpatizantes del depuesto presidente hondureño Manuel Zelaya marcharon este jueves en la capital para exigir el retorno del ex mandatario al país, al cumplirse un año de su partida al exilio a República Dominicana y el primer aniversario del régimen de facto de Porfirio Lobo, aún no reconocido por la mayoría de países latinoamericanos.

Marchamos para exigir el regreso de Zelaya y por la convocatoria a una constituyente, afirmó el subcoordinador del Frente Nacional de Resistencia Popular, Juan Barahona, mientras unos 5 mil manifestantes salieron a las calles en Tegucigalpa. La jornada se extendió a otros departamentos, donde hubo bloqueos de carreteras.

Frente al edificio de la Corte Suprema de Justicia los manifestantes gritaron asesinos, asesinos, en alusión a los magistrados que ordenaron la captura de Zelaya, alegato que sirvió para justificar su derrocamiento por militares el 28 de junio de 2009 tras ser acusado de promover una consulta nacional para llevar a una reforma constitucional y de que pretendía se aprobara la relección presidencial.

Zelaya fue enviado a Costa Rica, pero regresó subrepticiamente tres meses después y se refugió en la embajada de Brasil, de donde partió a Santo Domingo el 27 de enero de 2010, el mismo día que asumió el actual presidente. Ahora, Lobo logró que el Congreso recién reformara la Constitución para permitir consultas sobre ciertos artículos, incluidos los que prohibían la reelección presidencial.

Desde su exilio, Zelaya dijo que después de un año de gobierno Lobo deja resultados desalentadores y negativos al empeorar la situación socio-económica y política del país.