Kabul, 2 de mayo. El talibán anunció hoy con un ataque a un complejo residencial que alberga extranjeros, y que dejó siete muertos, el inicio de su ofensiva de primavera, horas después de la visita a Afganistán del presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien afirmó que la ejecución del líder de la red Al Qaeda, Osama Bin Laden, hace un año, fue el día más importante de su presidencia.

El ataque de los talibanes que vestían ropas de mujer con burkas, incluyó la explosión de un coche bomba en una de las principales arterias de Kabul, mientras un individuo hizo estallar su chaleco con explosivos ante el Green Village, donde se ubican las viviendas de los empleados de la Organización de Naciones Unidas (ONU), de la Unión Europea y de otros organismos internacionales.

El Ministerio del Interior afgano precisó que estos ataques, que fueron seguidos de un intenso tiroteo, dejaron siete muertos, seis de ellos afganos, además de 17 heridos. Asimismo, los tres asaltantes perdieron la vida, dos de los cuales abatidos por personal de vigilancia y de las fuerzas de seguridad.

Los talibanes afirmaron haber replicado así a la visita nocturna relámpago que realizó Obama a Afganistán, y al acuerdo de sociedad estratégica que firmó con el presidente afgano, Hamid Karzai, pacto que establece un papel estadunidense a largo plazo luego de que la mayor parte de las tropas de combate dejen el país a fines de 2014.

El mensaje es que en lugar de firmar un acuerdo de asociación estratégica debería pensar en retirar sus tropas de Afganistán y dejar a los afganos que reconstruyan su país, dijo el portavoz talibán Zabiullah Mujahid.

Los talibanes también anunciaron el inicio de su ofensiva de primavera, denominada Al Faruq, contra las fuerzas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte y todos los aliados que sostienen al gobierno de Afganistán.

Durante su estancia de seis horas, exactamente un año después de la eliminación de Bin Laden en su refugio de Abbottabad, Pakistán, Obama afirmó que vencer a Al Qaeda está ahora al alcance de Estados Unidos.

Ya en Washington, Obama reconoció que el día de la ejecución de Bin Laden fue el más importante de su mandato. Teniendo en cuenta lo que ello significaba para las familias (de las víctimas) del 11 de septiembre, lo que ello significaba para los hijos de los muertos en las Torres Gemelas, que nunca conocerán a sus padres, pienso que había una profunda satisfacción por el país en ese momento.

En entrevista a la NBC, dijo que sólo un puñado de miembros del equipo de la Casa Blanca estaba al tanto de la operación, aunque se tenía solamente 50 por ciento de certeza de que Bin Laden estaría en el lugar.