La orden de que el Centro de Arte Dramático AC (Cadac) desalojara la casona de Coyoacán que ocupa en régimen de comodato quedó sin efecto.

Gracias al apoyo de la comunidad artística e instituciones culturales, parece que la extinción del centro, que Héctor Azar fundó en 1975 con el objetivo de dedicar un espacio a la formación de actores y a la difusión del teatro, está a punto de resolverse según las palabras de su director Rabindranath Espinosa.

En entrevista con La Jornada mencionó: Tuvimos una reunión con el presidente del Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (Indaabin), de la Secretaría de la Función Pública, y aseguró que el problema se resolverá favorablemente para el Cadac. Quedó sin efecto el oficio de desalojo y la solución se buscará por medio del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA).

El Indaabin había solicitado el inmueble que ocupa en comodato el Cadac, ubicado en Centenario y Belisario Domínguez, y el plazo para dejarlo venció el pasado primero de junio. Según esa institución, cobrar los cursos y talleres que se imparten en el centro teatral lo hacía una asociación con fines de lucro, no civil.

El Centro de Arte Dramático solicitó la renovación del régimen en diciembre pasado para seguir seguir trabajando, pero el 3 de abril el Indaabin contestó que la legislación había cambiado y el comodato no sería renovado porque ahora sólo era para asuntos de asistencia social, para atender a grupos en indefensión, y que todos los servicios tenían que ser gratuitos.

Rabindranth Espinosa agregó: Por lo pronto seguiremos recolectando firmas y testimonios, así como con nuestras actividades. Ayer empezamos los cursos correspondientes al segundo trimestre.

Asimismo, informó que Consuelo Sáizar, presidenta del CNCA, “nos mencionó que ya había hablado con el titular del Indaabin, y que el problema está en vías de resolverse.

Este miércoles tendremos una reunión con ella, que ha mostrado gran disposición para solucionar el caso del Cadac, precisó.

Rabindranath Espinosa afirmó que en este proceso que enfrentó el centro los comentarios de la comunidad artística de México fueron de completo apoyo para que el Cadac siga con sus labores, dejando en claro que ninguna institución que se dedique a la enseñanza, difusión y trabajo artístico debe desaparecer, sino multiplicarse.

Expresó: Agradezco a todas las personas que nos han manifestado su apoyo. Así es como vamos construyendo una mejor sociedad.