León, Gto. Un pasivo de más de mil 200 millones de pesos y la creación de un sindicato de funcionarios panistas que buscan evitar su despido pueden convertirse en una piedra en el zapato para el ayuntamiento priísta de León, que entrará en funciones el 10 de octubre, reconoció la alcaldesa electa, Bárbara Botello. Ricardo Sheffield, último alcalde del PAN (partido que gobernó 24 años este municipio), dejará una deuda que incluye un quebranto de 37 millones de pesos por el fraude de Metrofinanciera, pasivos por 160 millones de pesos con el Instituto Mexicano del Seguro Social y 28 millones por liquidaciones.