La Haya, 27 de enero.

La Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya fijó el lunes una nueva frontera marítima entre Chile y Perú, en un intento por zanjar un viejo conflicto que ha provocado roces diplomáticos entre ambos países en la última década. El fallo, considerado histórico, provocó júbilo entre los peruanos y algunos disturbios de inconformidad en Chile.

En Lima, el presidente peruano Ollanta Humana se declaró complacido con la sentencia del máximo tribunal, y dijo que será acatado y ejecutado por Perú y espera que Chile actúe de la misma manera. En Santiago, el presidente chileno Sebastián Piñera ratificó que su país acatará el veredicto, ya que confirmó el planteamiento chileno, aunque lamentó la cesión de mar que hará a la nación vecina.

El veredicto otorgó a Perú parte del Pacífico que estaba controlado por Chile, pero deja en manos chilenas la rica zona pesquera costeña. La zona en disputa abarcaba 38 mil kilómetros cuadrados de océano (14 mil 670 millas) en un perímetro que se extiende hasta el límite de la plataforma continental de cada país.

Tras seis años de gestiones jurídicas y diplomáticas, la demarcación trazada por la Corte pone fin a prolongadas discusiones sobre cómo dividir una de las zonas pesqueras más ricas del mundo frente a costas de los dos países. Se confirmaron las fronteras reivindicadas por Chile hasta las 80 millas, pero más allá de ese punto, y hasta las 200 millas, dieron la razón a Perú.

El tribunal mantuvo sin cambios el límite terrestre fundamentado por Chile, en respuesta a una demanda que había presentado Perú en 2008 ante La Haya. El fallo es inapelable, obligatorio y de ejecución inmediata, aunque su implementación sería gradual y consensuada de modo bilateral.

El presidente Humala interpretó que se ha procedido al establecimiento de un límite que reconoce un espacio que en forma preliminar se puede calcular en alrededor 50 mil kilómetros de derechos soberanos de Perú, y afirmó que se ganó más de 70 por ciento de la demanda.

A su vez, Piñera declaró que “en esta zona Chile mantiene a plenitud sus libertades de navegación marítima y de navegación aérea, pero agregó que su país discrepa profundamente de la decisión. Humala y Piñera conversaron más tarde por teléfono sobre el tema, reportó el corresponsal de La Jornada, Enrique Gutiérrez.

La presidenta electa chilena Michelle Bachelet dijo esperar un antes y un después en los lazos con Perú, y aceptó que el fallo representa una pérdida dolorosa, aunque admitió que la mayor parte de la pesca quedó dentro del área ratificada por la corte para nuestro país, en lo que coincidió Piñera.

En Lima, los peruanos celebraron el fallo. ¡Arriba Perú!, gritaban. El gobierno pidió a la población mantener la buena sintonía con Chile, dado que prevalecen las viejas rencillas que se remontan a la confrontación militar de 1879-1883.

En Santiago se reportaron enfrentamientos entre chilenos que apoyaban la sentencia y otros que insultaban a los peruanos, el saldo fue de un detenido. En Arica, ciudad fronteriza al norte de la capital chilena, hubo varias protestas que fueron repelidas por la policía que detuvo a cuatro personas.

Dirigentes de pescadores demandaron al gobierno que no acate el fallo.