El culto a los santos populares en México está relacionado con procesos profundos de precarización social. En un Estado que funciona la gente no tiene que pedir milagros relacionados con la salud, hospitales, trabajo o hasta con encontrar un abogado honesto, aseguró José Manuel Valenzuela Arce, investigador y secretario Académico de El Colegio de la Frontera Norte (Colef), quien presentó una serie de documentales sobre el tema producida por la institución.

Se trata de cinco videos donde se muestran las prácticas religiosas que existen en torno a Jesús Malverde, Juan Soldado, el Niño Fidencio, la Santa Muerte y la montaña Cuchumá, en Tecate.

La serie se estrenó en el Distrito Federal el jueves pasado con la proyección de Santísima Muerte: niña flaca, niña bolita y Niño Fidencio en la Casa Colef, sede del colegio en la capital del país.

Ahí, Valenzuela, autor de Jefe de jefes. Corridos y narcocultura en México, comentó que si bien las necesidades no cubiertas por el Estado son en parte resposables del surgimiento de estas expresiones populares, no podemos explicarlo todo desde ahí, sino que se trata de una matriz mística y religiosa en la que se inscribe la realidad social y cultural del pueblo mexicano.

Por ello consideró imprescindible para entender nuestra realidad acercarse a lo que ocurre con la mística popular en nuestro país.

Los videos, explicó el director de la serie, Pavel Valenzuela Arámburo, permiten al observador conocer los rostros de quienes devotamente se identifican con santos populares, de una manera que otros estudios antropológicos no pueden.

Juan Soldado: el santo de los migrantes, Malverde. El mito santificado y Cuchumá: la montaña sagrada de Tecate, los otros filmes que completan la serie, se proyectarán en junio, como parte de un ciclo de cine documental organizado por El Colegio de la Frontera Norte y que tendrá lugar los últimos jueves de cada mes a las seis de la tarde en la Casa Colef, ubicada en Francisco Sosa 254, en Coyoacán.