Opinión
Ver día anteriorMartes 1º de septiembre de 2015Ver día siguienteEdiciones anteriores
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Ciudad Perdida

Revancha chuchista

Quiere el DF y recursos

Un nuevo frente amarillo

S

e trata de la revancha. No todo lo ha perdido Nueva Izquierda, es decir: los chuchos. Ese olfato que busca dónde está el poder, y que para conseguirlo no le importa vender principios ni llevar a los suyos a las peores condiciones de humillación, ahora les dice que es en el Distrito Federal donde deben clavar los colmillos.

Una nueva formación, en la que parece renacer Izquierda Democrática Nacional (IDN), la tribu de René Bejarano, junto con ADN (Alternativa Democrática Nacional), que dirige Héctor Bautista –aquel que encontró como pretexto una huelga de hambre en favor de los desprotegidos para abrir las puertas de Los Pinos, con el fin de entregar su grupo a Felipe Calderón– y Vanguardia Progresista, que lidera Héctor Serrano, parece haber desplazado a los chuchos.

Pero el asunto no es tan fácil. Si bien Leonel Luna, a quien se considera pieza importante en el tablero de René Bejarano, será quien conduzca los destinos amarillos en la Asamblea Legislativa del DF, los seguidores de Jesús Ortega y Jesús Zambrano buscan colar a uno de los suyos a la presidencia del PRD en el DF, puesto que Raúl Flores tendrá que dejar a la brevedad para desempeñarse como diputado local.

El argumento es que fue gente de esa tribu la que ganó espacios en el DF. Así lo han querido ver y así lo han vendido los acólitos del chuchismo, pero la realidad, como se ve por todos lados, es que fue esa tribu, la de Nueva Izquierda y su desprestigio, la que hundió el barco perredista que ya venía haciendo agua desde la firma del Pacto por México.

Hasta cierto punto el PRD en el DF, como ya hemos señalado, marcaba sus grandes diferencias con el nacional. Hubo momentos en los que esas organizaciones no parecían pertenecer al mismo partido; una independencia real se había creado, lo que permitía a los amarillos tener alguna respuesta positiva en la ciudad, a partir de ese no estar al servicio de los trueques del chuchismo.

Poco a poco, en los pasados tres años, las cosas cambiaron. Las acciones del PRD nacional en favor del PRI y su gobierno ya no despertaron protesta de la dirigencia en la ciudad; por el contrario, se acompañaron algunas de las acciones que en ese sentido se jugaban desde la plataforma amarilla. El resultado fue que el PRD perdió la mitad de lo que tenía en el DF y no se puede culpar a nadie más que a ese grupo, al de los chuchos, de esa derrota.

Ahora, según nos cuentan, vienen por el DF. Tratan de presionar para que alguno de los suyos tome la presidencia del sol azteca en la ciudad de México, lo que en términos reales sería, cuando menos, una falta de respeto a la militancia, que sabe quiénes son los culpables de su derrota en la ciudad, además del signo más claro de que no les importa lo que la gente opine, mientras mantengan un pedazo de las prerrogativas que otorga el gobierno.

De pasadita

Para el gobierno de Miguel Ángel Mancera será muy bueno invitar a la ciudadanía a participar en las decisiones, pero también en el financiamiento de lo que será el corredor cultural en la avenida Chapultepec. Esas formas de hacer que el gobierno se acerque a sus ciudadanos, más que innovador, que lo es, resulta una forma de coparticipación con la que se manda la señal inequívoca de que ese corredor no será enajenado a la iniciativa privada.

Si el modelo resulta atractivo y se repite para los 10 corredores que tiene planeados el gobierno de la ciudad, la oposición vecinal será mucho menor y los trabajos de construcción tendrán mucho menos resistencia de los vecinos, que ahora sí podrán sentir como suyos esos corredores. Buena noticia.