Dos médicos del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) incurrieron en violencia obstétrica y violaciones al derecho a la protección de la salud en agravio de una mujer de 34 años con 38 semanas de gestación, y también vulneraron el derecho a la vida de su hijo recién nacido.

Concluyó lo anterior la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) tras realizar una extenuante investigación del caso, motivo por el que dirigió una recomendación al director general del instituto, José Antonio González Anaya.

Tras analizar las evidencias, el organismo presidido por Luis Raúl González Pérez encontró elementos para acreditar violaciones a los derechos humanos a la protección de la salud materna y a vivir una vida libre de violencia obstétrica (en perjuicio de la mujer), y a la vida (en agravio de su hijo), acciones atribuibles a ambos doctores adscritos al Hospital General de Zona 2-A Francisco del Paso y Troncoso, en el Distrito Federal.

En su investigación, la CNDH acreditó que por la mala atención de los doctores, entre el 19 y 20 de junio de 2013 la mujer sufrió un largo y doloroso proceso de parto, y debido a que se negaron a realizarle una cesárea, y por el contrario, uno de ellos apretó cinco ocasiones el vientre de la mujer, el niño nació con paro cardiorrespiratorio y siete días después, el 14 de julio de 2013, falleció, al desarrollar encefalopatía hipóxico isquémica y asfixia perinatal.

Por ello, el ombudsman nacional recomendó al director del IMSS reparar el daño a la afectada, que incluya indemnización y atención médica y sicológica, así como su inscripción en el Registro Nacional de Víctimas, a efecto de que tenga acceso al Fondo de Ayuda, Asistencia y Reparación Integral.