Nueva York.

El secretario general de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, ofreció ayer la mediación del organismo para solucionar la disputa entre Colombia y Venezuela, surgida luego de que el 19 de agosto el gobierno de Caracas decidió cerrar parte de la frontera con su vecino y deportar a más de mil 400 indocumentados.

En un comunicado en el que reveló reuniones con las cancilleres de ambos países, la venezolana Delcy Rodríguez y la colombiana María Ángela Holguín, Ban anunció que ofreció sus buenos oficios si los dos países lo solicitan.

Ban manifestó a las cancilleres su confianza en que ambas naciones resolverán los retos fronterizos mediante un diálogo constructivo, y reiteró que sigue la situación con preocupación.

La crisis comenzó hace tres semanas, cuando Venezuela cerró algunos pasos fronterizos del estado de Táchira tras el ataque a tres militares y un civil, y comenzó la deportación de colombianos indocumentados.

El 7 de septiembre el presidente venezolano, Nicolás Maduro, ordenó ampliar el cierre del principal paso fronterizo del estado de Zulia, Paraguachón, y declaró estado de excepción en tres municipios de la región, adonde, dijo, enviaría 3 mil militares para reforzar la seguridad.

Desde el 19 de agosto la cifra de colombianos deportados de Venezuela alcanzó mil 482, y estimó que 19 mil 952 personas han retornado a Colombia de manera voluntaria por temor a ser repatriados, indicó la ONU.

El cierre progresivo de la frontera colombo-venezolana, según Maduro, es parte de una estrategia de Caracas para combatir el contrabando de alimentos, gasolina, tráfico de armas, droga y paramilitares.