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Riesgos ambiental y a la salud de juarenses, advierten activistas

Exigen anular consulta en la que se plantea permitir mina de cobre en Samalayuca
Corresponsal
Periódico La Jornada
Domingo 13 de septiembre de 2015, p. 25

Chihuahua, Chih.

Jóvenes de organizaciones de izquierda anunciaron que solicitarán a la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez (UACJ) anular la consulta pública realizada por la institución para el cambio del programa de manejo del área natural protegida del desierto de Samalayuca, donde se plantea autorizar la explotación de actividades mineras.

Desde hace seis años, la empresa Samalayuca del Cobre SA de CV, filial de la canadiense VVC Exploration Corp., ha solicitado reformar el plan de manejo de la reserva para permitir la apertura de una veta de cobre.

Encabezados por Abril Martínez, dirigente de la organización Juventudes de Izquierda, del Partido de la Revolución Democrática (PRD), y Crystal Aragón, presidenta del Comité Estatal del sol azteca, los activistas iniciaron una campaña de información entre los habitantes del seccional municipal de Samalayuca, perteneciente al municipio de Juárez para advertir sobre los riesgos ambientales y para la salud de las personas que implicaría la instalación de una mina a tajo abierto en esa zona.

Martínez sostuvo que en el área se encuentra el acuífero Cónejos-Médanos, la reserva de agua más importante de la región fronteriza, de donde se extrae gran parte del líquido que consume Ciudad Juárez.

La mina que se pretende explotar se localiza en la Sierra de Samalayuca, una formación de cerros que bordea el desierto a 60 kilómetros de Ciudad Juárez, donde fueron detectados yacimientos de cobre en mil 622 hectáreas, que desde hace seis años busca explotar la empresa Samalayuca Cobre SA de CV.

La inversión inicial planteada es de cien millones de dólares y se supone que generaría 200 empleos para los habitantes del seccional, donde no existen fuentes de trabajo y sus habitantes tienen que viajar a Juárez a trabajar en la industria maquiladora.

Desde hace seis años, cuando se inició la exploración, el proyecto minero ha generado controversia en la región, amainó en 2011, cuando la Semarnat negó el permiso para la explotación en el área natural protegida, considerada el desierto de mayor biodiversidad en América por el Fondo de Conservación de la Naturaleza.

Pero esa resolución ha sido impugnada jurídicamente por un grupo de ejidatarios de Samalayuca y la filial mexicana que apoyan el proyecto. Ahora, con el apoyo del PRD, los opositores están pidiendo replantear el mecanismo de consulta e involucrar a la población de Ciudad Juárez previo un amplio proceso de información y difusión.