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En Toluca, jóvenes llegaron al Centro Dinámico Pegaso; cientos de policías, armados

Marilyn Manson tropezó, pero se llevó la tarde en el Knot Fest

El metal me sacude las neuronas; estoy harto de oír rolas perronas en micros, exclamó un asistente

Actúa hoy una veintena de grupos; Slipknot, Deftones y The Offspring, entre ellos

Enviado
Periódico La Jornada
Domingo 16 de octubre de 2016, p. 8

Toluca, Méx.

Ayer, durante 12 horas, en la primera jornada del Knot Fest 2016, Seven comenzaron la fiesta metalera, los estertores, el sonido de luz que fluyó. El que se llevó la tarde en la primera jornada fue Marilyn Manson: tanto se esmeró en brindar un buen show que hasta se cayó. Cuando el público le gritó hijo de la revolución, bajó para cantar con los fans, y por andar pajareando tropezó para dar al suelo.

Otras ¡Estás bien gordo y cincuentón!, le gritaron al Reverendo, quien, en honor a la verdad, sí se ve grueso y hasta cachetón. Se puso el saco atigrado que lo caracteriza y se vio más robusto. No parecía la máquina sexual, como Manson se definió en algún momento

Para lograr empatía con el público se cubrió con una bandera de México: todo envuelto en el lábaro patrio cual niño héroe.

Estéticas oscuras y épicas

En su inicio ríos de chavos de todas las edades llegaron a la sede del reventón, el Centro Dinámico Pegaso en Toluca, donde lo primero que recibe el personal es el brillo del metal de las pistolas de cientos de policías.

La reunión metalera, que se extiende hasta este domingo, acogió en su escenario propuestas diversas, estéticas oscuras, algunas épicas, unas muy conocidas, como el referido Marilyn Manson y Slayer, para una veintena de grupos escandalosos de heavy metal, para sacudirse la cabeza y las ideas atadas por notas densas y tétricas, sublimes.

Algunos muchachos sólo llegaron por un grupo o artista. El resto del día será para echar la güeva, lo mismo que algunos reporteros a los cuales el metal les cae pesado.

En dos días de Knot Fest tocarán 36 grupos metaleros de las variantes más seguidas por millones en el mundo.

Aquí se prevé que asistan 120 mil personas.

El sol cayó a plomo y hubo quien se protegió por fuera con bloqueador solar, para que su cutis no se seque, y por dentro, con agua de cebada. Algo es seguro: muchas quincenas se quedarán aquí, en Lerdo.

Otra de las bandas que actuaron fue Chevelle, la cual causó espasmo y a los dispersos atrajeron su música poderosa y una serie de batacazos furiosos. Se escuchó a gritar a uno de los miles de asistentes: Eso es lo que quiero oír: algo que me mueva, que me sacuda el alma y las neuronas. Estoy harto de viajar en micros con rolas perrunas o perronas. Reggaetones aparte, rancheras borrachas, aquí esta lo mío: el metal, metal, metal.

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Para lograr empatía con el público, el músico estadunidense Marilyn Manson se cubrió con una bandera mexicanaFoto José Carlo González

Toneladas de bloques de hielo se derriten y trozos van a vasos servidos con asiduidad. Miles de litros de cerveza son la traducción del éxito empresarial: el metal jala metal.

Tirados cual vacas, cientos de jóvenes duermen el sueño de los justos. Tienen toda la vida por delante. Este es su sino, su presente para muchos.

Una pareja aquí y otra más allá y acullá se comen a besos. El metal funde su amor.

Otros dos crean una aleación. Corazones de acero. En el Knot Fest La juventud se funde. Oro con oro. Darío en la memoria.

Ante contextos políticos adversos sólo queda el reclamo hecho canción: ¡¡¡Políticos, sólo díganme una verdad!!! Somos millones que trabajamos para nadie. Lennon dixit.

En la gran rueda de la fortuna los muchachos arriesgan no la vida, sino el estómago. En el bonyi la cosa está peor.

El slam aquí no es para delicados, para seres que se quiebran y tienen agorafobia. Slayer explotó grueso y macanudo.

Por poco tiran a un forever young con bastón en mano de los tiempos del rock beatlemaniaco, pero no se arrestó y demostró que viejos están los cerros. Tiene muchas jornadas de experiencia.

Ya desfiló por la pasarela del Knot Fest la potencia fundidora de Seven, Atila, Chevelle, Disturbed, Arcadia Libre, Volumes. The Black Dahlia Murder, Hatebreed, Sevendust...

La tarde-noche deja escuchar los sonidos del silencio, con Disturbed, en un remanso catedralicio, una verdadera sorpresa del metal y sus posibilidades. Adiós a Paul Simon.

La tarde refresca y el metal se funde en el alma. Y este domingo continúa la fiesta metalera con otra veintena de grupos como Slipknot, Deftones y The Offspring.