La organización Sin Fronteras informó que en virtud de que el terremoto ocurrido el pasado 12 de enero en Haití perturbó gravemente el orden público y generó una grave amenaza para la vida y la integridad de los haitianos.

Y además, afectó económica y sicológicamente a los extranjeros, radicados en la nación caribeña, exhortó al gobierno mexicano a poner en marcha un programa especial de protección a los haitianos residentes en territorio nacional.

El 15 de enero pasado Sin Fronteras realizó el exhorto. Cinco días después, integrantes de esa organización no gubernamental asistieron a una reunión al Instituto Nacional de Migración (INM) a la que asistieron también representantes de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y Amnistía Internacional, y presentó 11 propuestas para instrumentar dicho programa.

En un oficio dirigido a Sin Fronteras, el 29 de enero pasado el INM y la Comar se comprometieron a poner en marcha varias de las propuestas presentadas.

Entre ellas están el garantizarár con prontitud “el acceso al procedimiento de la condición de refugiado a todos aquellos nacionales de Haití que así lo deseen; expedir visas humanitarias a los haitianos, como una de las vías para regularizar su estancia; otorgar protección complementaria, previa recomendación de Comar al INM, a extranjeros haitianos que habiendo solicitado su reconocimiento como refugiados no reúnan los requisitos legales necesarios.

Otras de las acciones que se emprenderán son suspender la expulsión de extranjeros de nacionalidad haitiana. Además de que la Comar facilitará el acceso de refugiados a la revalidación de estudios, ingreso a educación básica y capacitación técnica.