Mientras el Abierto de Monterrey no ha sido objetado por la Organización de Tenis Femenil (WTA) a causa de la inseguridad en México, el máximo organismo del deporte blanco varonil (Asociación de Tenistas Profesionales) tomó precauciones sobre el torneo nacional que comienza este lunes en Acapulco.

Las advertencias de la ATP generaron un poco de miedo. Por ejemplo, pidió llegar lo más tarde posible al torneo y, en caso de perder, irse cuanto antes, reveló el uruguayo Pablo Cuevas, quien, como la mayoría de los que jugarán en el puerto mexicano, aún está en Buenos Aires.

“Escuché un poco acerca de la situación en Acapulco. La ATP nos informó enviándonos varios mails. Estuvo bastante correcta en eso. Nos dijo que había problemas, que no estaba nada fácil allá porque hubo varios secuestros, asesinatos y esas cosas”, señaló el argentino Juan Mónaco, número 30 de la clasificación mundial.

“Nos comunicaron que una vez que quedáramos eliminados lo mejor era irnos lo antes posible, que no nos quedemos ahí de vacaciones porque estaba bastante peligroso. Dijeron que no salgamos –el torneo se juega dentro del hotel–, así que no habrá tanto problema. Ya tenemos una alerta y trataremos de ser conscientes”, agregó.

Las preocupaciones de la ATP, en algún punto compartidas por la WTA, se fundamentan en que Acapulco amanece frecuentamente con asesinatos y tiroteos entre cárteles rivales en pugna por la ruta del Pacífico.

Varias ciudades mexicanas serán sede de competencias deportivas este año y están sufriendo la violencia del crimen organizado. Recientemente, uno de los torneos de golf que formaba parte del circuito de la LPGA, el Tres Marías de Morelia, fue cancelado por la inseguridad asociada con las drogas, según los responsables.

Cuevas mencionó que por miedo algunos jugadores decidieron no jugar en Acapulco: “Sé que algunos se borraron, los que estaban en la qualy (calificación previa), sobre todo”.

Abierto de Monterrey, esperanza

Para Hernán Garza, director del Abierto de Monterrey, la conservación de ese torneo, único femenil con figuras de clase mundial y sobre cancha dura, a realizarse del 28 de febrero al 6 de marzo, es la posibilidad de revertir los actos violentos en Nuevo León y diversos puntos del país.

“En Monterrey, una ciudad de progreso, empresaria y de industria, se necesitan este tipo de eventos, no solamente por la ciudad, sino por el país. Debemos contrarrestar un poquito toda esta ola de violencia que se ha vivido.

(El torneo) tiene que seguir, y el hecho de que se siga teniendo confianza en el torneo, que todas sus jugadoras estén con deseos de venir, es un testimonio de esperanza para el país y para el estado, porque eso es lo que queremos: dar una imagen buena y positiva al exterior, asentó Garza en entrevista con La Jornada.

Señaló que si bien la WTA se mantiene al tanto de la situación en México, no ha objetado a Monterrey como parte del circuito femenil más importante en el mundo del deporte y ninguna jugadora ha manifestado intención de cancelar.

La tercera edición del Abierto regiomontano estará encabezada por la serbia Jelena Jankovic (ocho del mundo) y solicitaron inscripciones 160 tenistas más, de las cuales sólo entrarán 24 al cuadro principal y 32 al torneo de calificación, a realizarse en el Sierra Madre Tenis Club, en el municipio San Pedro Garza García.

Dijo que el torneo se enfrenta diferente y no existen motivos de inquietud: Hay mucha tranquilidad, es un municipio donde están corporativos, grandes hoteles. Hay infraestructura de clubes de tenis y de golf muy importantes. Hay un gran respeto y muy buena vigilancia.

Agregó que se pondrán en marcha los dispositivos de seguridad que cotidianamente solicita la WTA.

Por lo que se refiere a la representación del tenis mexicano, que carece de figuras, la organización del torneo otorgará un wild card a la jugadora nacional mejor ubicada en la clasificación mundial. Será el turno para la poblana Ximena Hermoso, ocupante del escaño 663 en la lista WTA, quien también participará una semana antes en el Abierto de Acapulco.

Garza se mostró consciente del alto grado de dificultad que implica el torneo para la mexicana, cuyo nivel al menos por ahora es inferior, pero también está convencido de que “todo lo que se haga en pro del deporte, si se sigue fomentando entre la niñez, dentro de algunos años nacerá una figura.

México está urgido de talentos, y los hay, pero deben formarse desde abajo, de manera más integral del deportista desde los colegios. Se va a dar, tiene que darse tarde o temprano, afirmó.

Con información de Dpa