Washington, 26 de julio. Decenas de personas manifestaron este martes frente a la Casa Blanca para pedirle al presidente Barack Obama que ponga fin a las deportaciones de indocumentados, cuando su gobierno ha alcanzado cifras récord en esas expulsiones.

Los activistas, defensores de una reforma migratoria y algunos congresistas hispanos, con pancartas que decían Detengan la deportación de estudiantes y sus padres, se congregaron para denunciar que el gobierno de Obama ha deportado a más de un millón de personas sin papeles.

El presidente, quien defiende una reforma migratoria que abra un camino para regularizar la situación de los 11 millones de indocumentados en Estados Unidos, afirma que su gobierno demócrata debe cumplir las leyes migratorias, pero que lo hace de manera humana y prioriza la deportación de criminales.

Según las cifras oficiales, entre 2009 y 2010 el gobierno de Obama deportó a poco menos de 800 mil indocumentados, aunque cerca de la mitad tenían antecedentes criminales. Pero los activistas afirman que Obama puede hacer más.

Lo que estamos pidiendo es que detengan las deportaciones ahora para que podamos seguir esperando hasta que el Congreso pase una reforma migratoria, señaló a periodistas Felipe Matos, un joven indocumentado que llegó a Estados Unidos hace una década, cuando tenía 10 años.

Matos fue una de las personas que interrumpieron a Obama cuando daba un discurso el lunes ante la principal organización hispana, La Raza, para gritarle Sí, tú puedes cuando el mandatario dijo que algunas personas quisieran que burlara el Congreso y cambiara las leyes por mí mismo.

Estoy muy decepcionado de Obama, dijo Matos, quien defiende el proyecto de ley Dream Act, que proporcionaría estatus migratorio condicional a las personas que llegaron a Estados Unidos antes de cumplir 16 años y estudien o ingresen al ejército.

Esa ley fracasó en diciembre pasado en el Congreso, donde también han quedado paralizados intentos de reforma migratoria.

Utiliza tu poder y no le tengas miedo, instó a Obama el legislador demócrata Luis Gutiérrez (Illinois). Agregó que mientras los demócratas tuvieron mayoría en las dos cámaras del Congreso en los dos primeros años de su gobierno, Obama no impulsó con fuerza una reforma migratoria.

Mientras, poco después Gutiérrez y otros nueve activistas fueron detenidos durante un acto de desobediencia civil en la capital.

Entre los arrestados se encuentra un joven activista del proyecto Dream Act para la legalización de estudiantes indocumentados, una religiosa y el director de la organización comunitaria Casa Maryland, Gustavo Torres.