Una vez detenidos Joaquín El Chapo Guzmán y las tres personas encargadas directamente de su seguridad (El Picudo, Nariz y Cóndor, los tres ex integrantes del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales del Ejército), elementos de la Armada de México continúan sus operativos con la intención de desmantelar la red de colaboradores y sicarios del ex líder del cártel de Sinaloa.

Fuentes navales confiaron lo anterior y agregaron que los marinos no están enfocados en la persecución de Ismael El Mayo Zambada, quien junto con Juan José Esparragoza Moreno, El Azul, quedó al frente del mencionado grupo delictivo, ‘‘porque sabemos que él se encuentra en la sierra desde hace tiempo’’.

Después de que diversos funcionarios del gabinete de seguridad afirmaron que el objetivo siguiente era la captura de El Mayo, los marinos consultados desmarcaron a sus compañeros que operan actualmente en Sinaloa de tener esa intención. Subrayaron que su objetivo es acabar con la estructura que dependía directamente de El Chapo.

Los informantes agregaron que las unidades de infantería de marina y de fuerzas especiales mantienen los operativos con el objetivo de desmantelar las redes de producción y distribución de drogas, pero también para detectar las de corrupción que se generaron por años en la entidad a favor de El Chapo Guzmán.

Agregaron que una de las pistas que siguen los marinos tiene que ver con la forma en que Guzmán tuvo acceso a la red de drenaje de Culiacán, que le permitió conocer exactamente qeué propiedades comprar para construir las casas de seguridad (oficialmente fueron siete los inmuebles descubiertos por la Armada de México), lo que le permitió la construcción de túneles que conectaban con el desagüe, gracias a un mecanismo que levantaba la tina del baño.

Los declarantes consideraron que seguramente El Chapo tuvo el apoyo y la complicidad de funcionarios del municipio de Culiacán, porque ese tipo de información y mapeo no se obtiene tan fácilmente.

Respecto de sus hombres de confianza, Manuel López Osorio, El Picudo, era quien se encargaba de su seguridad cuando salía de la capital sinaloense, e incluso fue el que esperó a El Chapo Guzmán en una coladera, a unos pasos de la casa ubicada en la calle de Humaya 130 Poniente, colonia Guadalupe, cuando los marinos estuvieron a punto de capturar a su jefe.

De acuerdo con fuentes navales, Carlos Manuel Hoo Ramírez, El Cóndor, era prácticamente la sombra de Guzmán; al igual que los otros dos, fue miembro de las fuerzas especiales del Ejército, pero en el círculo cercano del capo lo conocían peyorativamente como ‘‘el mandadero’’; sin embargo, tenía los conocimientos y adiestramiento para garantizar la seguridad del narcotraficante de Badiraguato.

El Picudo fue el encargado de llevar a Guzmán a Mazatlán, donde días después fue capturado en compañía de su esposa Emma Coronel. El custodio aprehendido, según los informantes, reveló datos importantes sobre El Chapo.

A su vez, Mario Hidalgo Argüello, El Nariz, fue detenido en los cateos realizados el día 17 de febrero en las casas de seguridad y era el encargado de brindar seguridad a su jefe en la capital de Sinaloa.