jornada


letraese

Número 161
Jueves 3 de diciembre
de 2009



Director fundador
CARLOS PAYAN VELVER

Directora general
CARMEN LIRA SAADE

Director:
Alejandro Brito Lemus

pruebate

Cáncer de próstata.
El prejuicio es nocivo para la salud

Al hablar de salud de la próstata, llega a la mente la técnica más común para revisarla: el tacto rectal. En medio del temor de ver afectada su hombría, los mexicanos carecen de información básica para prevenir el cáncer.

Mario Alberto Reyes

La salud sexual masculina enfrenta grandes retos. Los prejuicios en el imaginario social de los varones, en combinación con la falta de eficientes políticas públicas en materia de salud, complican la disminución de las 5 mil muertes que cada año genera el cáncer de próstata entre los mexicanos mayores de 40 años.

La próstata es una glándula del sistema reproductor masculino que se encuentra localizada enfrente del recto y debajo de la vejiga urinaria, una de sus funciones consiste en producir parte del líquido seminal que protege y nutre a los espermatozoides contenidos en el semen.

El cáncer en esta glándula se produce cuando las células prostáticas mutan y se multiplican descontroladamente. Mario Ulises Pérez Toriz, presidente de la Sociedad Mexicana de Urología (SMU), explica que los varones mayores de 40 años con antecedentes familiares de la enfermedad son quienes están más expuestos, por lo que deben acudir con un urólogo a practicarse una exploración física llamada tacto rectal, la cual consiste en la introducción de un dedo en el recto para detectar posibles alteraciones en la glándula.

En entrevista con Letra S, el especialista subraya la necesidad de realizar la exploración física, pues la sola aplicación de la prueba de antígeno prostático –consistente en un análisis de una muestra de sangre tomada en ayunas– es insuficiente para detectar una posible formación cancerígena. Añade que para una oportuna detección es indispensable un ultrasonido transrectal de próstata para, desde el punto de vista radiológico, determinar tamaño, forma y volumen de la glándula prostática.

“La prueba del antígeno prostático sola es un grave error porque los tres estudios nos dan una alta sensibilidad y especificidad de cada varón analizado. Por eso es pertinente que, así como las mujeres cada año acuden a una revisión de las glándulas mamarias, los varones, a partir de los 40 años y con antecedentes familiares de la enfermedad, vayan a examinarse con su urólogo”. En el caso de los hombres cuyos familiares no hayan presentado esta patología, Pérez Toriz recomienda iniciar las revisiones a partir de los 50 años.

De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud dados a conocer en 2006, en México cada año se reportan entre 4 mil y 5 mil muertes por cáncer de próstata, cifra que podría ser menor, asegura el urólogo, en caso de que los afectados acudieran a tiempo a los servicios de salud, pues la mayoría solicita ayuda médica cuando el cáncer se encuentra en etapas avanzadas.

Agrega que el cáncer de próstata empieza a ocupar el tercer lugar dentro de las causas de mortalidad entre los mexicanos, pues estadísticas revelan que 14.7 por ciento de los varones tiene esta enfermedad.

Otras afectaciones
A diferencia de los tumores malignos, la hiperplasia prostática es considerada como una enfermedad altamente curable, los síntomas consisten en dificultad para orinar, retardo en la primera micción de la mañana, orinar con pausas o deseo persistente de seguir orinando. En contraste, si se trata de un carcinoma de próstata no hay síntomas.

Sobre los factores de riesgo, estudios hechos en América y Europa, han determinado que la alimentación rica en grasas saturadas predispone a los varones a padecer esta patología. Los análisis han revelado que, por grupos étnicos, los afroamericanos tienen una mayor predisposición a este cáncer, seguidos por los sajones americanos y europeos.

Reacio a comentar sobre la carencia de políticas públicas del Estado mexicano en materia de salud sexual masculina, el también miembro de la Sociedad Latinoamericana para el Estudio de la Sexualidad atribuye la escasa asistencia de los varones a los servicios de salud a “una falta de conciencia individual”.

En ese sentido, Pérez Toriz adelanta que la SMU lanzará una campaña sobre la importancia de salvaguardar la salud sexual masculina mediante una “reeducación de la población” para detectar oportunamente padecimientos catastróficos como lo es el cáncer de próstata.

Respecto a las repercusiones que los tratamientos tienen sobre el ejercicio de la sexualidad, el experto dijo que muchas veces quienes son sometidos a una cirugía radical de próstata requieren de rehabilitación sexual, pues cuando el cáncer ha salido de la glándula prostática, aún con técnicas depuradas, algunos nervios responsables de la erección son dañados, o en caso de recurrir a la inhibición de la testosterona, la libido disminuye. Sin embargo, una vez concluidos los tratamientos, la vida sexual recupera su vigor.

S U B I R