Política
Ver día anteriorJueves 23 de mayo de 2013Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

Buscan justificación para generar una movilización con causas ajenas a la vida estudiantil

Quienes tomaron rectoría sólo usaron de pretexto el tema del CCH, dice la UNAM

Evidenciados, actos desmedidos de violencia, saqueo y conductas vulgares contra la universidad, afirma

 
Periódico La Jornada
Jueves 23 de mayo de 2013, p. 16

El origen del conflicto, marcado por la violencia, generado por las personas que tomaron la torre de rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) carece de planteamientos académicos, asegura la máxima casa de estudios.

Señala que, por el contrario, se basa en reclamos ajenos a la revisión de los planes y programas de estudios del Colegio de Ciencias y Humanidades (CCH), tema que sólo ha sido un pretexto utilizado por un grupo minoritario y no representativo.

Las autoridades universitarias difundieron un documento en el que hacen una relatoría del proceso que se inició con actos violentos en el plantel Naucalpan, a principios de febrero pasado, e incluyó la toma de la dirección general del CCH y de rectoría.

Ante esos hechos –subrayan–se levantaron denuncias ante las autoridades federales y estatales por conductas ilícitas como: agresiones y lesiones a universitarios, haber puesto en riesgo la integridad de la comunidad, irrumpir y dañar instalaciones, y sustracción de equipos y distintos objetos, tanto de trabajadores como del patrimonio universitario.

Cuando se recuperó la torre de rectoría –enfatiza el documento– quedaron evidenciados los actos desmedidos de violencia, saqueo y de conductas vulgares y soeces contra el patrimonio universitario y de los trabajadores de diversos pisos.

Si bien las autoridades agregan que ya se terminó de cotejar los inventarios y se determinó la cuantía de los daños, no detallaron a cuánto equivalen las pérdidas. Este recuento de hechos se dio a conocer justo un día antes del mitin convocado para este mediodía en la explanada de rectoría por el grupo que por 12 días y con los rostros cubiertos ocupó el edificio.

El texto da cuenta de los reiterados ofrecimientos de diálogo de las autoridades universitarias. Remarca que la parte institucional propuso realizarlo entre mayo y junio, con una sesión de conclusiones en agosto, en tanto que los inconformes plantearon que tuviera lugar en agosto y septiembre.

Se hace hincapié en que el rompimiento del diálogo ocurrió durante la cuarta sesión resolutiva, el 16 de mayo (en la que se pretendía fijar las bases para el trabajo de las mesas), cuando quienes esperaban a la comisión representante de los inconformes irrumpieron en las oficinas donde se desarrollaban las pláticas.

“No se entiende la actitud de dichas personas. Cuando decidieron violentamente tomar las instalaciones de rectoría exigían diálogo; (pero) ante la propuesta de la institución de realizarlo a la brevedad y de manera amplia y pública, lo evitan, buscando que las sesiones se extendieran hasta septiembre. Su postura, en el fondo, denota una actitud contradictoria: demandar diálogo, pero no lo celebran.”

El grupo de inconformes, agrega la UNAM, dice que pretende fomentar la participación de la comunidad, pero no reconoce a quienes ya han participado en las discusiones del proceso de actualización del CCH, además de que pretende ser interlocutor único en los diálogos.

Su actuar evidencia tácticas dilatorias con fines diferentes a un auténtico debate sobre la actualización del plan de estudios del colegio. Lo que sin duda pretenden es encontrar justificación para generar una movilización con causas ajenas a la vida estudiantil.

La casa de estudios destaca que aun con las recurrentes muestras de intransigencia por parte de ese grupo, continuará un proceso amplio e incluyente de discusión en torno a los planes y programas de estudio del CCH, que concluirá en noviembre.