Villahermosa, Tab., 8 de septiembre. El gobernador Andrés Granier Melo declaró hoy que Tabasco está en quiebra y no podrá realizar las aportaciones que le corresponden por ley para recibir recursos del Fondo de Desastres Naturales (Fonden), porque ha utilizado gran parte de su presupuesto para hacer frente a las inundaciones que han afectado la entidad en los cuatro años recientes.

El mandatario priísta reiteró su petición al gobierno federal para que exima al estatal y a los municipios de las aportaciones paritarias (un peso por cada peso que enrtega la Federación) para obtener los recursos del Fonden, y que declare la entidad zona desastre natural.

Nos declaramos insolventes ante las aportaciones que hemos hecho en los tres años pasados. Hemos invertido más de 2 mil 400 millones de pesos de Tabasco para recuperar y componer y reconstruir. No es posible que sigamos invirtiendo todo el dinero en reconstruir y no en avanzar, expuso en entrevista luego de inaugurar una ruta de transporte urbano.

Tabasco, cuyo presupuesto para 2010 es de 30 mil millones de pesos, ha sufrido cuatro inundaciones desde 2007, las cuales, según cifras oficiales, han dejado pérdidas por casi 40 mil millones de pesos. En octubre y noviembre de ese año Villahermosa vivió la peor tragedia en 50 años, que dejó más de un millón 200 mil damnificados y daños calculados en 31 mil 871 millones de pesos. En octubre de 2008, los desbordamientos ocasionaron pérdidas por 5 mil millones de pesos y y en 2009 el monto ascendió a 2 mil millones de pesos.

La contingencia de este año ha dejado 139 mil afectados, y el número sigue creciendo, dijo.