Deportes
Ver día anteriorLunes 2 de febrero de 2015Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio
 
Toros

Sólo detalles de El Zapata y Mario Aguilar; El Fandi desaprovechó al mejor toro

En la corrida 15, un bien presentado pero deslucido encierro de Javier Garfias
Foto
PROTESTA. En la Plaza de Toros México, policías se apostaron frente a manifestantes antitaurinosFoto Xinhua
 
Periódico La Jornada
Lunes 2 de febrero de 2015, p. a35

Pues no. Los cecetlos –directivos, docentes y asesores del Centro de Capacitación para Empresarios Taurinos de Lento Aprendizaje, antes Plaza México–, congruentes con su fantasía de que la fiesta son ellos, la inventaron ellos y la sostienen ellos, no pudieron complacer al público capitalino con un cartel redondo de matadores banderilleros en el que era obligada la inclusión de Antonio García El Chihuahua, quien con valor, técnica y sentido del espectáculo triunfó el 4 de enero pasado en la undécima corrida, y que en 2014 terminó con 23 corridas toreadas y quinto lugar en el escalafón. La pobre entrada fue la respuesta.

Con razón, en el reciente Congreso Nacional Periodismo y Tauromaquia, celebrado en la ciudad de Tlaxcala, se señaló que al duopolio taurino no le interesa favorecer el surgimiento de figuras nacionales ni de ídolos populares mediante estímulos, seguimiento y confrontaciones planeadas entre los diestros más destacados, de trayectoria sostenida y de mayor potencial. Sus inconfesables razones tendrán, por ello se curan en salud y afirman orondos: Al que no le gusten los toros, que no vaya, cuando deberían decir: Al que no le guste mi antojadiza oferta de espectáculo taurino, que ni se le ocurra ir.

Pero como se trata de llenar fechas y no de reposicionar el espectáculo, para la decimoquinta corrida de la temporada el Cecetla, en despliegue de imaginación, casi repitió el cartel del octavo festejo, pues volvieron a alternar el tlaxcalteca Uriel Moreno El Zapata (40 años, 18 de alternativa y dos corridas en el año que comienza) y el granadino David Fandila El Fandi (33 y 14 como matador), al que esa tarde le indultaron uno de regalo, ahora con el hidrocálido Mario Aguilar (23 años, 5 y 3 tardes en enero), que dejara buen sabor de boca en la séptima corrida, al cortarle la oreja a uno de Xajay y que por su estilo debió estar en otra combinación. Se lidió un encierro bien presentado y deslucido, salvo el segundo, de Javier Garfias.

El Zapata se vio solvente con su deslucido primero, paliabierto y astifino, que dio un emocionante espectáculo al arrancarse de largo al caballo del picador César Morales, quien detuvo la fuerte embestida con un puyazo en lo alto para recibir la ovación en el tercio, desmontado y destocado. A su segundo, que en el puyazo también tumbó, más por exceso de sedante del jamelgo que de fuerza del astado, le dejó un par monumental en cámara lenta, un cuarteo trasero y un violín. Con la muleta no hubo acomodo ante el deslucido comportamiento y todo quedó en tibias palmas.

El Fandi desperdició lastimosamente a Genetista, un buen toro que en el encuentro tumbó al caballo, recibió tres puyazos y al que Mario Aguilar hizo bello quite por mandiles y desmayada revolera. Fandila banderilleó con más efecto que resultados e inició su faena de hinojos en los medios tras comprobar la clara embestida por ambos lados. Luego minitandas sin ajustarse con un toro que debió irse sin orejas y al que despenó de entera muy trasera. En el otro, espectaculares pares, tres trapazos y pésimo con la espada. Oyó una rechifla.

Mario Aguilar ejecutó con su primero ceñidas tafalleras y realizó una faena ensimismada a un toro soso y débil que requería descararse más con él para que luciera mejor la cabeza, valor sereno y buenas maneras de Aguilar, que culminó su labor con certera estocada. Su segundo no tuvo fuerza y las intenciones de Aguilar apenas lucieron, sin evitar una voltereta.

En la columna del próximo domingo hablaremos de la docena de buenos toreros españoles que la tauromafia hispano-mexicana no ha querido traer a México.